11 ago 2025
El órdago de la juventud al mundo y a la Iglesia
“No somos turistas de lo espiritual. Venimos con mochilas llenas de dudas, heridas, canciones y esperanza. Y con una certeza en el corazón: Cristo está vivo. Y nos llama”
Este manifiesto y el encuentro de León XIV con la juventud tiene dos direcciones: el mundo y la propia Iglesia. Este proyecto que seguirá en Santiago en 2027 y que culminará en el Jubileo extraordinario en Jerusalén en el 2033 señala el problema más grave que tiene Occidente y el mundo rico y es la falta de respuestas a las grandes preguntas del sentido que están viviendo las generaciones jóvenes actuales
Otro mundo es posible, otra vida es posible, y lo tenemos en Cristo porque vive, camina con nosotros. Sólo depende si aceptas este peregrinaje en la esperanza y una parte importante de la juventud está decidida a llevarlo a cabo en el seno mismo de las tinieblas que cubren el mundo de hoy
La juventud de hoy está cansada de esas etiquetas de curas y cardenales progresistas, conservadores, de centro, de misas tridentinas y de vuelta al latín y minucias varias. De obispos y cardenales que parecen príncipes y no servidores de la causa de Cristo