La píldora del día después.

A mi me parece bien que si a una pareja se les ha roto el condón o bien ha ocurrido una violación, recurra a este método. Pero si se recurre a él, que sea un médico quien lo prescriba y quien de las debidas advertencias. Imagínese que una de estas jóvenes usa la píldora, y toma irresponsablemente después una bebida alcohólica, coca cola, te, café, etc, que ocasionan problemas con la toma de la píldora. Además, imaginemos que una joven recurre a la píldora dos o más veces en un mismo ciclo menstrual, esto es otra contraindicación.
El ministerio debiera centrarse en extender campañas ABC. Por mucha píldora del día después que se dispense, no disminuirán los abortos en España. Básicamente porque muchas mujeres que aquí abortan vienen del extranjero y cada vez son más. Además, esta píldora es un anticonceptivo malo, cuando no logra impedir la fecundación baja considerablemente su eficacia, pasando en unos pocos días a disminuir drásticamente su efectividad, y eso antes de ocurrir la anidación (es por esto que se cuestiona que ciertamente pueda impedir la anidación). Por tanto más que ser una píldora, que en mi opinión y por lo que he leído es dudoso que lo sea, puede provocar que no pocas jóvenes recurran a la píldora y se encuentren dos meses después embarazadas porque la píldora fracasó, y ya se sabe en los abortos que esto puede desembocar.
Pero en fin, con una ministra de Sanidad como Trinidad Jiménez, licenciada en derecho y con auténtica aversión por lo que fueron sus estudios, vamos apañados. Se ha metido directamente en un berenjenal.
La píldora del día después es anticonceptiva (hasta ahora es lo único demostrado), una concepción ocurre a partir de las doce horas tras el coito hasta los tres días. La píldora actuaría impidiendo a los espermatozoides llegar al óvulo o impidiendo la ovulación. Cuanto antes se tome más efectiva es, si se dejan pasar 24 horas su efectividad disminuye considerablemente, y tras dos días o tres días poco puede hacer ya.
Tendría un efecto adicional de impedir la anidación del cigoto, pero aun no se ha demostrado. Por ello, no es posible asegurar que sea abortiva. Y más cuando un embarazo no comienza hasta que el cigoto no anide, como afirman los ginecólogos alemanes. De hecho muchos cigotos no llegan a anidar por causas naturales. Otros ginecólogos aseguran que el embarazo comienza con la fecundación, y en base a esta idea la píldora sería abortiva. Pero si bien todos reconocen que sin anidación es imposible detectar un embarazo, y por tanto se hace muy difícil saber si es abortiva una píldora si previamente se desconoce si se ha producido una concepción, y además se desconoce bastante su efecto de impedir la anidación.
La anidación se produce tras 5 o 6 días después del coito, la píldora pierde mucha efectividad a partir del segundo día, y para el cuarto es ineficaz. ¿Por qué? Al parecer porque si te la tomas transcurrido un tiempo tras el cual se ha producido la concepción, existe la posibilidad que el embrión anide. Por ejemplo, antes de pasar 12 horas hay una efectividad de entre el 99% y 98%, entre las 12 y 72 horas, se ha promediado una efectividad del 80 %, a partir de las 72 horas, de menos del 50 %.
Hay una curiosidad que cabe destacar respecto a la efectividad de la píldora. Para ciertos conservadores que sostienen que es abortiva, la efectividad de la píldora ronda el 98% en las primeras 48 horas, y que es más efectiva pasadas las 24 horas hasta las 60 horas. Sin embargo esto lo hacen con un doble e interesante motivo:
Primero: Que su consumo se produzca lo más tardío posible, así se intenta conseguir que quienes consuman la píldora, no obtengan los resultados satisfactorios que aspiran conseguir con la misma.
Segundo: Si afirman una efectividad tan tardía, pueden insinuar perfectamente que sus propiedades son abortivas y así pueden vender y sostener la polémica a su gusto.
Es curioso como quienes más sostienen la efectividad de la píldora a largo plazo son médicos católicos y gente ligada a posturas conservadoras. Sin embargo se insiste muchísimo por parte de sus partidarios en que deber ser tomadas cuanto antes.
La wikipedia por ejemplo no se ha librado de la batalla entre partidarios y detractores. Así tiene un artículo extenso y contradictorio en el que por una parte se asegura que debe tomarse antes de las 72 horas, y otra parte que asegura que después. Un día se ve un escrito en el que se habla de la alcalinización del pH en el útero, y otro día en que lo retiran. Al respecto desconozco si vira tanto el pH del utero, de 7.2 a 9 por efecto de la píldora. Lo raro es que este efecto que tanto se asegura mata al embrión, de unos resultados tan deficientes (50% de efectividad) a partir de la las 72 horas cuando se estima que la concepción se ha podido haber producido.
No parece que incluso los fabricantes de la píldora se decanten en promocionar estas “fabulosas propiedades” que sin embargo promocionan sus detractores, a los fabricantes les vendría como anillo al dedo que a parte de anticonceptiva fuese abortiva, así la consumirían con más seguridad más mujeres.
No obstante, yo no veo a ninguna universidad católica haciendo un estudio sobre pacientes para investigar los efectos abortivos de la píldora. No los van a hacer porque si ni se atreven a tocar un condón, y eso que hablan de poros por los que pasan espermatozoides, menos se atreverán con la píldora. Desde luego, con unos fabricantes que tiran por lo bajo la efectividad de su producto, y con unos adversarios que tiran por todo lo alto su efectividad para producir un aborto, creo que el negocio de los primeros está asegurado. Y eso que es raro que a los segundos no les haya dado por asegurar que provocará cáncer, como hace tres décadas sugirieron, con estudios incluidos, de la píldora anticonceptiva. Pues eso, veamos quien nos confirma que la píldora del día después es abortiva para negocio de los primeros, o quien demuestra lo contrario para mayor frustración de los segundos y menos negocio de los primeros.