San Antón acoge la presentación de "Francisco: palabra profética y misión" "Este Papa ha generado libertad, que quiere extender a todos los miembros de la Iglesia"

(Jesús Bastante).- "Le tenemos miedo al Evangelio. Nos da pánico. Nos tranquiliza la 'religión'. Por eso, lo más genial que ha tenido Francisco ha sido obligar a la Iglesia a afrontar esta cuestión". José María Castillo, con su voz atronadora, puso la guinda a la presentación de "Francisco, palabra profética y misión", que tuvo lugar en la madrileña iglesia de San Antón.

Una presentación que sirvió como homenaje al Papa Francisco y a su trabajo por ese sueño de construir una Iglesia "pobre y para los pobres", y que no podía ser acogido en otro lugar que no fuera el templo "24 horas" del padre Ángel, ante un centenar de personas, entre los que había teólogos y personas sin hogar, sacerdotes y parados, mujeres y hombres, unidos por el deseo de colaborar, siquiera con su presencia, en la primavera de Bergoglio.

El libro, coordinado por Religión Digital y la revista chilena Reflexión y Liberación, y coeditado con Mensajeros de la Paz, aglutina un compendio de los discursos, homilías y testimonios más relevantes de estos cuatro años de Pontificado, así como una serie de reflexiones de estudiosos, teólogos y creyentes de ambas orillas del Atlántico.

Así, junto a Castillo, el teólogo chileno Jorge Costadoat, sj., reivindicó algunos de los cambios originados en la Iglesia tras la llegada de Bergoglio, desde su deseo por cambiar la Curia a las "puras señales de sencillez y dignidad", que contribuyen a "achicar la distancias" entre el pueblo y la jerarquía. "Mucho queda por hacer", admitió el jesuita,  quien advirtió que "la gente más poderosa ya le hizo la cruz a este Papa".

Costadoat subrayó el discurso ante los Movimientos Populares y la Amoris Laetitia como "signos de esa opción por los pobres" y de apertura a un mundo en el que la Iglesia tiene que insertarse, o corre el riesgo de perder definitivamente el tren. "La forma de actuar de este Papa muestra una libertad para expresarse, que quiere que se extienda a todos los miembros de la Iglesia", recalcó, señalando cómo "habla sin papales, sin obligación de ser infalible".

"Este Papa ha generado libertad. Fíjense en lo que había hace cuatro años", aplaudió Costadoat, si bien admitió que queda mucho por hacer, en materia de igualdad de derechos y responsabilidades de la mujer ("en el Sínodo sobre la familia no ha votado ninguna mujer"), y en la asunción de los cambios por parte de una jerarquía inmovilista. "Todavía estamos lejos", subrayó.

José María Castillo, del otro lado de la orilla, destacó el "giro determinante" que Bergoglio está dando a una institución anquilosada "Si Dios, en la Encarnación, se humanizó en Jesús, el Papado, en Francisco, está humanizando la Iglesia", defendió, denunciando -como el Papa- la "esclerosis espiritual" que aboca a una institución que teme renovarse a sí misma.

De ahí surgen los enemigos de este Papa, que no salen "a cara descubierta", sino sibilinamente. Y es que "los peores enemigos de Francisco están en los ambientes religiosos, en donde encuentran su consistencia y su prestigio". En cambio, "a este Papa se le ve más feliz entre la gente, en la plaza, en la calle, en los hospitales y en las cárceles, entre los niños, los enfermos y los ancianos. Aquí está la clave de futuro de la Iglesia".

También, desde las dos orillas, las dos revistas de las que surge este "Francisco: palabra, profética y misión". El director de Religión Digital, José Manuel Vidal, quien defendió que "ya es hora" de que los cristianos se levanten y "apoyen decididamente a este Papa" que ha venido a renovar la Iglesia y los corazones de los hombres y las mujeres de este mundo. "Estamos ante una situación histórica, y debemos apoyar al Papa, porque tiene detrás a  los pobres y al Evangelio", subrayó Vidal.

Por su parte, el director de Reflexión y Liberación, Jaime Escobar, reivindicó la figura del Papa Francisco como "profeta de este tiempo", necesario, junto a millones de creyentes de todo el mundo, para "aportar en la lucha para lograr otro mundo". "Para eso es imprescindible que se conozcan algunos de los principales pensamientos, las claves de este Papa, y por eso es tan necesario un libro como éste", recalcó.

El cierre del acto corrió a cargo del padre Ángel García. El párroco de San Antón, pórtico de la Iglesia de la misericordia en España, celebró que "la palabra pueda transformar el mundo", y más en el caso de Francisco, "con una palabra profética, porque es práctica y transformadora".

"El mensaje de Francisco es para mí una esperanza en medio de este panorama de violencia, la mejor luz de apoyo para los que sufren, el perfecto ejemplo para los que nos sabemos privilegiados y, por ende, responsables de hacer algo por esos que sufren", recalcó el presidente de Mensajeros de la Paz. "Ésa es su revolución: denuncia, pero al mismo tiempo, ternura. Tolerancia, diálogo, y por supueto, misericordia, que ha de ser la nueva razón de la Iglesia".

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