22 mártires católicos que fueron asesinados por el rey de Buganda entre 1885 y 1887 Casi un millón de peregrinos en la Fiesta de los Mártires de Uganda

Hoy se celebra en el Santuario de Namugongo, Uganda, la Fiesta de los santos Carlos Lwanga y compañeros mártires, los conocidos mártires de Uganda, verdadera semilla de la fe en este país africano. Desde mediados del mes de mayo peregrinaciones con destino al santuario partían desde las diócesis ugandesas. Este año todo gira también en Namugongo en torno al año jubilar, por eso el lema de este Día de los Mártires es: “Oh Señor, permíteme ver de nuevo, yo, tu peregrino de la Esperanza”.

El millón de peregrinos han llegado desde las 19 diócesis ugandesas, pero también de las vecinas Kenia, Tanzania, República Democrática del Congo, Ruanda y de Sudán del Sur, e incluso de fuera de África. Muchos de ellos llegan caminando, en muchos casos durante días, como ocurre año tras año con la diócesis ugandesa de Lira, situada a más de 300 kilómetros del santuario.

Un millar de fieles comenzaron el 15 de mayo la peregrinación hospedándose cada día, a lo largo del recorrido, en parroquias, centros pastorales e instituciones religiosas. Los peregrinos dan las gracias por la generosidad y la hospitalidad mostradas por muchísimas personas a lo largo de la ruta, que donan alimentos, frutas e incluso dinero para apoyar a los peregrinos.

Todo ello para conmemorar a los mártires católicos que fueron asesinados por su fe a finales del siglo XIX, cuando llegaba el Evangelio a estas tierras. La peregrinación a Namugongo simboliza la devoción y el arrepentimiento, y también busca elevar una súplica a la intercesión de los mártires por necesidades personales o familiares. Pero sobre todo es un camino de fe que incluye celebraciones eucarísticas diarias, adoración silenciosa y meditación ante el Santísimo Sacramento, la Coronilla de la Divina Misericordia y el rezo del Santo Rosario.

La peregrinación a Namugongo simboliza la devoción y el arrepentimiento, y también busca elevar una súplica a la intercesión de los mártires por necesidades personales o familiares

La celebración de los Mártires de Uganda conmemora a los 22 mártires católicos que fueron asesinados por el rey de Buganda entre 1885 y 1887, y los de dos catequistas mártires asesinados en Paimol, al norte del país, en 1918. Cada año es una de las diócesis ugandesas, por turno, la que se encarga de toda la celebración, aportando su toque de originalidad. Este año será la diócesis de Lugazi, en el este del país, quien se encargue de las celebraciones, coordinando a los voluntarios y cuidando que toda la jornada se desarrolle del modo más correcto posible.

Desde la canonización de los mártires, en 1964, los peregrinos no han dejado de aumentar, pero ya, al poco tiempo de su martirio, muchas personas comenzaron a pedir su intercesión. Fue en aquellos primeros años cuando un misionero holandés caminó con su joven comunidad cristiana hasta Namugongo y, tras celebrar una misa, erigió una cruz en el lugar, lo que daría comienzo “oficial” a las peregrinaciones a Namugongo. Los mártires fueron beatificados por el Papa Benedicto XV en 1920 y canonizados por San Pablo VI el 18 de octubre de 1964 en plena celebración del Concilio Vaticano II.