El nuevo arzobispo de Nueva York promete cambio de estilo

Figura conservadora, afable y popular, con gran capacidad pastoral, Dolan fue designado a los 59 años por el papa Benedicto XVI en un período delicado para la Iglesia en Estados Unidos, que apenas se recupera del efecto devastador de los escándalos por casos de pedofilia de más de 4.000 sacerdotes.
La Iglesia Católica estadounidense pagó 436 millones de dólares en 2008 por esos abusos en los que estaban involucrados miembros del clero.
'No voy a evitar abordar esas cuestiones', dijo Dolan al ser interrogado en rueda de prensa sobre ese y otros temas de sociedad espinosos, como el debate sobre el casamiento homosexual, al que la Iglesia se opone.
Dolan adelantó que estará 'activo y presente' en esos frentes, aunque admitió que tras las medidas adoptadas tras el escándalo sexual 'siempre habrá gente que piensa que no haremos demasiado'.
Por otra parte, el nuevo arzobispo dijo que en su gestión pondrá especial énfasis en la ayuda a los inmigrantes. 'La Iglesia Católica siempre ha sido vista como un santuario' por los inmigrantes en dificultades, dijo.
Según Dolan, en Nueva York 'la Iglesia se ha convertido en la versión espiritual de la estatua de la Libertad', vista históricamente como un símbolo de bienvenida a los inmigrantes que llegaban al puerto de la ciudad.
La archidiócesis de Nueva York no es la más grande de Estados Unidos con sus 2,5 millones de fieles, de los cuales el 52% son hispanos, ya que la supera la de Los Ángeles, pero es considerada como la más influyente políticamente.
El arzobispo neoyorquino es visto por los norteamericanos como el rostro público del Vaticano en Estados Unidos y el fallecido papa Juan Pablo II definió una vez el cargo como el del 'arzobispo de la capital del mundo'.
En reconocimiento a la importancia de la comunidad latina, la arcuidiócesis de Nueva York escogió a Sor Rosa, una monja mexicana de un convento del Bronx, para que lea la Biblia en español durante la misa de investidura de Dolan.
Dolan, de rostro redondo y bonachón a los 59 años, arzobispo de Milwaukee desde 2002, se definió como 'un obispo feliz' en un editorial publicado este miércoles por el diario popular local Daily News.
'Mi objetivo es ser un obispo feliz, compartir alegrías y risas con ustedes', escribe Dolan, anticipando que 'me verán en el desfile de la San Patricio, en el estadio de los Yankees y procesiones, festejos y barbacoas en nuestras 400 parroquias' cuyo presupuesto totaliza 500 millones de dólares.
'Es un pastor excepcionalmente bueno, que sabe comunicar la prédica de la Iglesia, dentro y fuera de ella', comentó recientemente a AFP Brian Kane, profesor de Teología en la universidad católica DeSales de Pensilvania.
'La diferencia (con Egan) será sobre todo una cuestión de estilo', comentó el profesor Brian, al señalar que además de ser particularmente simpático y carismático, se trata de un prelado igualmente conservador que su predecesor.