La casa de Burke, epicentro de los encuentros de los conservadores, que exprimen sus posibilidades, mientras admitirían el tándem Parolin-Ërdo
En 2023 el Papa retiró la asignación que le correspondía como alto cargo de la Curia, y se le impelió a abandonar su apartamento en Via Rusticucci, a pocos pasos de la plaza de San Pedro. Parece ser que Burke continuaría viviendo en la lujosa residencia (donde suelen alojarse altos personajes de la Curia) aunque ahora pagándoselo de su bolsillo
El grupo más conservador admite que el 'legado Bergoglio', al menos en lo tocante a la sinodalidad, la prioridad por los pobres y descartados y el diálogo con los alejados, continuará
Cumbre ultra en casa del cardenal Burke: tal y como relata La Stampa y ha podido confirmar RD, el purpurado norteamericano, a quien Francisco quitó el sueldo y obligó a pagarse el alojamiento, recibió a un grupo de cardenales este 1 de mayo, aprovechando la jornada de descanso en las congregaciones generales con motivo del Día Internacional del Trabajo.
Como se recordará, en 2023 el Papa retiró la asignación que le correspondía como alto cargo de la Curia, y se le impelió a abandonar su apartamento en Via Rusticucci, a pocos pasos de la plaza de San Pedro. Parece ser que Burke continuaría viviendo en la lujosa residencia (donde suelen alojarse altos personajes de la Curia) aunque ahora pagándoselo de su bolsillo. O del de sus benefactores: el cardenal norteamericano fue asiduo colaborador de Steve Bannon y el movimiento MAGA, uno de los grandes grupos de presión en este precónclave.
Pese a las intrigas, lo cierto es que el grupo de los ultraconservadores (del que parece haberse bajado el cardenal Rouco Varela, que por el momento ha regresado a Roma, y no se le espera en la iglesia de Montserrat, donde reside cuando viaja a la Ciudad Eterna) está comenzando a tomar conciencia de la dificultad de imponer un candidato netamente tradicional, que revierta las reformas emprendidas por el pontificado de Francisco. El 'legado Bergoglio', al menos en lo tocante a la sinodalidad, la prioridad por los pobres y descartados y el diálogo con los alejados, continuará.
Pese a ello, y después de convencerse de que no es el momento para un 'antibergoglio' en el solio pontificio, los líderes del sector ultraconservador ( Burke, Sarah, Müller, Zen, Stella...) podrían estar tratando de aglutinar sus votos en torno al candidato que, a día, de hoy, podría aglutinar más consensos antes de entrar en la Sixtina, y que no es otro que Pietro Parolin.
Según nuestras fuentes, el secretario de Estado podría llegar al Cónclave con unos 45 apoyos, 15 más de los que tuvo el candidato más votado en la primera elección de 2013, monseñor Scola (Bergoglio fue subiendo tras un primer escrutinio con 26). Una cantidad no suficiente, pero sí muy importante, especialmente si desde el principio no surge un candidato del sector partidario de profundizar la renovación emprendida por Francisco. Aquí entraría el grupo de ultraconservadores, que podría aglutinar en torno a una decena de votos (son más los mayores de 80 en este sector, que los que entrarán en la Sixtina) a condición (no escrita, pues este tipo de pactos están expresamente prohibidos por las reglas del cónclave) de elegir como secretario de Estado a Peter Ërdo.
Desde la casa de Burke, se estarían lanzando mensajes on line a cardenales, pero también a medios de comunicación, siguiendo los criterios apuntados en la web de Edward Pentin (https://collegeofcardinalsreport.com/), a modo de semáforo, sobre su función en la defensa de la doctrina: ordenación de mujeres diáconos, bendición de parejas homosexuales, el celibato opcional, las misas en latín, el acuerdo Vaticano-China o el proyecto de Iglesia 'sinodal'.