¡Feliz Martes Santo! No puede faltar ya que estamos en Semana Santa, las lamentaciones, que son precisamente las composiciones compuestas para la liturgia de las horas de este tiempo litúrgico fundamental para que nuestra fe sea verdaderamente sólida.

Creo que nunca ha estado por aquí Randall Stroope (1953), compositor estadounidense nacido en Albuquerque. También trabaja como conferenciante y director de coros; es uno de los compositores más activos de su país. Estudió en la universidad de Colorado Boulder y también en la de Arizona. Estudió con quienes fueron aprendices de Nadia Boulanger. En sus obras interviene principalmente la voz y utiliza textos de diversas procedencias, siendo una de sus obras más interpretadas una con letra de Garcilaso de la Vega. Sus obras, por supuesto, han sido grabadas e interpretadas por prestigiosos conjuntos, especialmente estadounidenses. Su actividad como director de orquesta también ha sido frenética, participando en festivales de prácticamente todo el mundo.

Vamos a disfrutar de sus Lamentaciones de Jeremías, que es una composición para coro. El compositor plantea la obra como un estudio universal de las emociones humanas. En la obra hallamos sufrimiento, ira, autocompasión y frustración, algo que es común a todo el género humano. De hecho, está basada alrededor de cinco emociones distintas: aflicción (reflejada en la introducción), ira a los que pasan (que se muestra en o vos omnes), una autocompasión que consume a la persona (si est dolor), furia y súplica ante el abandono (recordare Domine) y la incapacidad de afrontar lo que se nos viene encima (recordare). Es una de sus obras más interpretadas y fue un encargo de la Asociación de Directores Corales de Texas.

La interpretación es del Nanyang Technological Choir dirigido por Darius Lim.