Salmos para Chichester



Entre los compositores norteamericanos, uno de los principales era también un afamado director de orquesta. Quizá esta faceta es la que ha podido eclipsar su carrera como compositor, aunque hasta cierto punto ya que tiene una obra que es muy conocida, aunque no es la que te traigo aquí. Hoy te presento una obra que no te dejará indiferente. ¿Quieres conocerla?

Dicho compositor es Leonard Bernstein (1918-1990), nacido en Massachusetts, de familia judía (este aspecto es importante para nuestra obra de hoy). Estudió en Harvard donde sobresalió como director de orquesta. Sin embargo, también sobresalió componiendo. Esa obra muy conocida a la que antes aludía es el musical West Side Story. ¿Quién no conoce su famoso "América"?

Hoy, sin embargo, te ofrezco otra obra también conocida de él. Son los Chichester Psalms, compuestos en 1965, para niño soprano o contratenor, coro y orquesta. En el Reino Unido tiene lugar cada año el "Southern Cathedrals' Festival". Como su nombre indica tiene lugar en catedral del sur de Gran Bretaña, alternándose entre Salisbury, Winchester y Chichester. En 1965 se celebró en esta última catedral y a Bernstein le fue encargada una obra para tal efecto.

Bernstein, siguiendo su ascendencia judía, utiliza el texto en hebreo para los salmos. Aunque por esta época la composición ya no era la primera actividad de Bernstein la obra es bastante compleja, sobre todo para la parte del coro. Un instrumento muy utilizado por Lenny (como solía llamarse a Bernstein) es el arpa. Las dos de esta pieza tienen una complejidad también especial.

Hoy te traigo el segundo de los Salmos de Chichester, titulado Adonai ro-i ("El Señor es mi pastor"), usando textos de los salmos 23 y 2. La voz del niño soprano encarna de alguna forma a la voz del niño David, el rey.

Por si tienes interés, este año el Southern Cathedrals' Festival se celebra en Salisbury. Tienes más información aquí.

La interpretación corre a cargo de Markus Baur (niño soprano), el Coro de Poznan y la Orquesta Sinfónica de la Radio Nacional Polaca dirigidos por el propio Leonard Bernstein. Fíjate que aunque el niño comienza de una forma algo dubitativa, llega a alcanzar una cota de calidad que hasta el propio Bernstein le toca el hombro en señal de aprobación, sin duda emocionado.

Volver arriba