Aquel cuyo nombre no debe ser pronunciado, porque si hasta con el diablo soy precavido con este aun más, plantea hacer un boicot a los productos catalanes por el cierre de las emisoras de la COPE. Tal vez deba puntualizar un par de cosas.

En primer lugar me parece mal que le cierren a la COPE emisoras en Cataluña. Estamos en un país libre, y si alguien quiere poner a lo que en mi opinión son impresentables en su emisora está en su derecho. Además, el esperpento COPE tiene aspecto de acabar mal y no me parece que sea el momento de privar a los catalanes del gusto de ver morder el polvo a ese laicista, pro abortista e insultón de Federico. Vamos, que ahora que ataca al Opus Dei es el momento de oírle, porque la soga se la esta poniendo y ya solo falta que se arroje al vacío.

En segundo lugar hay que respetar la libertad de expresión, y ante las mentiras de la COPE se le responde con verdades y refutaciones. Si el gobierno de la Generalitat no sabe hacerlo es o porque son unos zoquetes, o tienen pocas luces, o más bien una mezcla de ambas causas. Me parece injusto que los catalanes paguen no solo las miserias de su gobierno autonómico, sino las iras de españoles resentidos

En tercer lugar cuando Dios se dispuso a salvar a Sodoma y Gomorra, pensó en salvar las ciudades si en ellas hallaba al menos 5 justos. Pues Cataluña estoy seguro que los justos y las buenas gentes se cuentan por millones. Castigar al pueblo catalán, a sus empresarios, a sus trabajadores, etc, con un sabotaje como este es hacerles la peor injusticia a los justos catalanes. Menos mal que este sujeto malvado no tiene iniciativas inspiradas por Dios o por la Iglesia, aunque seguro se las desea que así sea. Y me alegra saber que hasta Yahve en el antiguo testamento era más compasivo y misericordioso que este sujeto zampa hostias, cuyo nombre no puedo revelar porque temeroso soy del poder del mal.

En cuarto lugar, este sujeto le hace ese gran favor que tanto se las desea la ERC y los independentistas exacerbados. Queriendo llenar de odio y rencor el corazón de los españoles. Sin duda cuantos más catalanes se vean despreciados por España, más le crecen los votos a la radical ERC, y más contribuimos a cumplir las profecías de aquel profeta apocalíptico en que se ha convertido Aznar. España no nos la rompe un estatuto, nos la rompen los que siembran la cizaña, ERC la siembra en Cataluña y este sujeto cuyo nombre no cito en el resto de España, así la división está asegurada y Federico, Aznar, Cesar Vidal, Nacho Villa, Carod Rovira, Ibarretxe, etc, y otros sujetos terminarán teniendo la razón con el España se rompe porque se han dedicado por igual a romperla.

Aquel cuyo nombre no cito del PP fue, pero se aburrió enseguida al comprobar su poco futuro, y es que es tan radical que no cuaja en casi todas partes por las que ha pasado y seguirá pasando, no porque lo inviten sino porque se empeña en estar. El caso es que copia ideas acebianas y zaplanarias, sin darse cuenta que los dos alumnos predilectos de Pepiño y su corriente están hoy acabadas. Para hacer el Pepiño solo uno basta y es el original, y demos gracias si solo hay uno, los demás son imitadores y por imitarlo políticamente se suicidaron. Con un poco de suerte, esta última ridícula versión de Pepiño se eutanasiará a si mismo. Y tal como ocurrió con otras versiones pepiñeras, descansaremos en paz.