Tras ver la foto de Soraya Sáenz de Santamaría, sigo sin comprender la polémica que se ha montado por esto. ¿Qué importa la pose? A mi Soraya no me cae ni bien ni mal. Creo que hay cosas de ella más criticables que una foto en la que se presenta sensual.

De todas formas, creo que es más desagradable ver los famosos abdominales de José María Aznar que las piernas de Soraya, quien por cierto las tiene muy bonitas.

Y ahora pongamos los puntos sobre las ies, porque Pedro J. Ramírez tiene una y con una tilde. La foto de Soraya en la portada de El Mundo es obra del director de este diario. Sin duda Pedro J. es hombre listo, ambicioso y taimado. Y Soraya ingenua y bobalicona. El caso es que Pedro J. se ha encargado de vapulear a Rajoy desquitándose con su niña. Sin duda esta estrategia de Pedro J. consiste en desalentar a los votantes del PP para pasarlos a su nuevo protegido que es mi partido, UPyD.

Es peligroso en este país que un partido se ponga bajo el amparo y paraguas de un poderoso medio de comunicación independiente. El PSOE lo ha pagado en ocasiones con el grupo PRISA y por eso buscaron alguien más fiel como Público. Y el PP buscó el amparo de la COPE y El Mundo y así le ha ido. Ahora desde la COPE lo despedazan continuamente y El Mundo no pierde ocasión de bombardearles. UPyD puede beneficiarse mucho de la COPE y El Mundo, pero es peligroso ampararse en medios como ellos porque siempre querrán que hagas lo que ellos dicen, y sino se vengan de ti.

Esta es una polémica absurda. A mi entender más vale percatarse de la malicia de Pedro J. que se está vengando del PP, y no caer en la tentación de atacar a Soraya con tanta saña. Ella ha hecho una tontería poniéndose en manos de periodistas a las órdenes de Pedro J, pero estoy seguro que ha aprendido la lección. Y si alguna vez gusta de hacer algo igual o más atrevido, lo hará como lo hace todo el mundo, desde la Interviú.