Tiempo de la creación Vente a la montaña... que allí está el Señor

Hace varias décadas... cientos y cientos de jóvenes subían a la montaña de Tentudía a celebrar con profundidad la pacua del Señor. En ese contexto nació la canción de Brotes de Olivos, "Vente a la montaña..."
Ayer subimos a la montaña centenares de fieles de la diócesis de Mérida-Badajoz, que junto al Pastor dedicábamos una jornada a la contemplación, oración y reflexión, en una convivencia de armonía con la naturaleza, en ese mirador sagrado, entre nosotros como comunidad diocesana y teniendo como centro al Señor. El Via Creationis y la Eucaristía fue el centro. El joven Pedro Mora recien llegado de Venezuela nos da cuenta del encuentro en palabras y vídeo propio para compartir.
| Pedro Mora
Encuentro Diocesano por el Tiempo de la Creación en Tentudía: “Cuidar la tierra, tejer la paz"

Tentudía, 5 de octubre de 2025.
Unidos a Dios y a la tierra
Bajo el cielo claro de la Sierra de Tentudía, en el punto más alto de nuestra diócesis, centenares de fieles se reunieron este domingo en torno a su pastor, Don José, arzobispo de Mérida-Badajoz, para celebrar la Jornada Diocesana del Tiempo de la Creación. Un día de encuentro, oración y compromiso por una ecología integral, vivida desde la fe, la comunión y el amor a la tierra extremeña.
La jornada comenzó con la acogida fraterna y el recorrido del Vía Creationis, ocho estaciones de contemplación y reflexión a la luz del Génesis y del libro de la Ciencia, elaboradas por la Delegación Diocesana para la Ecología Integral. Los participantes, entre cantos y oraciones, caminaron entre los montes de Tentudía reconociendo en cada elemento natural —la tierra, el agua, el aire, la vida— la huella del Creador.
El momento central fue la Eucaristía de la Creación, recientemente aprobada para este tiempo litúrgico, presidida por el arzobispo. En ella, las ofrendas expresaron la diversidad y la belleza de la vida: la Iglesia, el mundo rural, la familia, los mayores, los jóvenes, la universidad, la vida religiosa, la inteligencia artificial y la acción social de Cáritas. Todo se unió como símbolo de un mismo compromiso: cuidar la casa común y trabajar por la paz, la justicia y la dignidad de todo ser humano.
La Eucaristía concluyó con un clima de esperanza y fraternidad que se prolongó en la mesa compartida, una comida solidaria con sabor a familia y a tierra, donde la “paella” simbolizó la comunión de todos los presentes.
El comunicado final del encuentro recordó la riqueza natural y espiritual de Tentudía, “santuario de la flora pacense”, y nos invitó a reconocer en la creación la mano de un Dios Creador que nos llama a la contemplación y a la acción. Desde lo alto de la sierra, los participantes alzaron una mirada de fe y compromiso:
“No somos dueños, sino custodios; no conquistadores, sino hermanos de todo lo creado. La justicia y la paz no son solo ideales, sino tareas cotidianas que construyen el Reino de Dios en nuestra tierra.”
En el décimo aniversario de Laudato Si’, la diócesis renovó su compromiso por una ecología integral que una la fe, la ciencia y la vida, con el deseo de seguir trabajando —desde Extremadura y con el corazón universal de la Iglesia— por un mundo reconciliado con Dios, con la naturaleza y entre los hombres.