Brujas y fantasmas

Este fin de semana se celebra en medio mundo Halloween, un pagano recuerdo anglosajón de nuestra fiesta de Todos los Santos y de Difuntos. Una noche marcada por los disfraces, por el reparto de caramelos, por el "truco o trato" y por la diversión. No es una fiesta religiosa, no sustituye a ninguna fiesta religiosa. Puede gustar más o menos, pero los que siempre ven fantasmas donde no los hay, ahora han sumado a sus fantasías las brujas, los zombies y demás personajillos.

A mí no me gusta Halloween, me parece que nuestra cultura es bastante más rica que la anglosajona como para ir "importando" usos y costumbres. Pero tampoco creo que sea para tanto. Y, por supuesto, me parece desproporcionada la idea de "combatir" Halloween pidiendo a los niños que se disfracen de ángeles o santos. Que si quieren, también lo pueden hacer. El problema, como en todo, no es el disfraz, sino lo que simbolice. Y tomarse este día, y esta noche, como un baile de disfraces no me parece nada insano.

Insisto, yo no celebro Halloween, ni me disfrazo ni pido "truco o trato". Pero de ahí a advertir presencias demoníacas o una victoria del Señor Oscuro frente a la fuerza de la luz va un trecho. Y es que hay mucho fantasma en todo esto. Y mucha gente que se toma todo demasiado en serio.

baronrampante@hotmail.es
Volver arriba