Las banderas de España y el Vaticano ondean a media asta en la CEE Omella se suma al luto nacional: "Recordaremos siempre a cada difunto de esta pandemia y a sus familiares"

Aunque no habrá funerales de Estado, la Iglesia se ha sumado al dolor de la ciudadanía, y muchos obispos han participado del minuto de silencio que ha tenido lugar a mediodía en todas las capitales de provincia
Sistach: "La pandemia nos ha hecho tomar conciencia de que no somos individuos aislados, sino sociables y nos necesitamos mutuamente"
Diez días de luto, el mayor en la historia de la democracia. En memoria de las víctimas del coronavirus, de sus familias y de todos los que han sufrido, y sufrirán, sus efectos. Aunque no habrá funerales de Estado, la Iglesia se ha sumado al dolor de la ciudadanía, y muchos obispos han participado del minuto de silencio que ha tenido lugar a mediodía en todas las capitales de provincia.
"Recordaremos siempre a cada difunto de esta pandemia y a sus familiares", escribía esta mañana en Twiter el cardenal de Barcelona y presidente de la CEE, Juan José Omella. El purpurado añadía que "Dios nos ama a cada uno de nosotros con un amor único. Nuestros nombres están escritos en la palma de su mano", al tiempo que ponía a todos los fallecidos "en las manos misericordiosas de Dios".
Dios nos ama a cada uno de nosotros con un amor único. Nuestros nombres están escritos en la palma de su mano. Recordaremos siempre a cada difunto de esta pandemia y a sus familiares. Los pongo a todos en las manos misericordiosas de Dios.
— Card. Juan José Omella (@OmellaCardenal) May 27, 2020
Por su parte, el obispo auxiliar de Valladolid y portavoz episcopal, Luis Argüello, ha rezado un PadreNuestro este mediodía por los fallecidos en la pandemia a las puertas de la catedral, junto al resto de trabajadores y voluntarios de la diócesis. Tras el silencio, el cardenal Blázquez anunció la celebración de un funeral por las víctimas el 25 de julio en el templo mayor de Valladolid.
Misas en las diócesis
Otras diócesis optarán entre el día de Santiago y el 26 de julio, Día de los Abuelos, para celebrar jornadas en homenaje a los fallecidos. Del mismo modo, como ya anunció RD, la catedral de La Almudena acogerá una misa en memoria de las víctimas, con la participación de todos los obispos de la Comisión Permanente, los días 6 o 7 de julio, si las circunstancias sanitarias lo permiten.
El antecesor de Omella en Barcelona, Lluís Martínez Sistach, publicaba en su perfil social una reflexión sobre la pandemia: "La pandemia nos ha hecho tomar conciencia de que no somos individuos aislados, sino sociables y nos necesitamos mutuamente. Los otros pueden pegarnos el virus pero nosotros también a ellos. Para estar bien todos hemos de practicar la solidaridad entre todos. Esto pide cambios".
Las banderas de España y el Vaticano ondean desde hoy a media asta en la de la sede de la Conferencia Episcopal Española, en la calle Añastro de Madrid. Los obispos, con este gesto, hacen visible este «tiempo de recuerdo y oración por todas las víctimas del COVID-19», informa Ecclesia.
Además, unidos en oración, piden que «el Señor les dé la Paz y la vida». Por último, no se olvidan de todos los familiares, también víctimas de este sufrimiento provocado por la pandemia a los que quieren transmitir «el consuelo de la esperanza».
La pandèmia ens ha fet prendre consciència que no som individus aïllats, sinó sociables i ens necessitem tots mútuament. Els altres ens poden comunicar el virus i Nosaltres també. Per estar bé tots hem de practicar la solidaritat entre tots. Això demana un profunt plantagament
— Cardenal Sistach (@sistachcardenal) May 26, 2020