Cornudos y, además, apaleados.

Y me añade dos noticias de gran interés. Que daré de menor a mayor. Se me dice que en las páginas web de la Romaxe y sus aledaños están desapareciendo, apresuradamente, los textos más comprometidos y los enlaces más comprometedores. Como si se hubieran asustado.
La segunda, y verdaderamente importante, es un who is who de las principales figuras del grupo desde su creación. No la transcribo porque muchos son para mí personas desconocidas y tampoco puedo responder de la veracidad de mi informante. Pero debe ser facilísimo averiguarlo.
Tras los nombres de no pocos de ellos figura la siguiente coletilla: sacerdote, casado, sacerdote, arrejuntado; en algún caso con monja...
Señores obispos gallegos: no sólo están consintiendo lo inconsentible, de ser cierto lo que me dicen, y ustedes lo saben mejor que nadie, no tienen que hacer averiguaciones, es que amparan el seguir perdiendo clero a chorros.
Ya vivieron el fenomenal fracaso de los curas obreros, puerta segura para dejar la Iglesia. Ustedes o sus antecesores. Si ahora quieren mantener abierta la del Romaxe pues no se extrañen de las consecuencias.
Y por último algo que ya clama al cielo. Algunos de ellos no sólo han sido o son párrocos sino que tuvieron puestos docentes en sus seminarios. Y hasta del libro de uno de ellos que acaba de dejar su ministerio recientemente, por supuesto que con pareja incluida, se hace propaganda en una publicación de la archidiócesis compostelana.
Me encantaría, señores obispos, que la información que me ha llegado no fuera cierta. Me lo confirman e inmediatamente sale en este Blog su desmentido. Con enorme alegría por mi parte. Pero, si es verdad lo que se me dice, les va como anillo, no espiscopal, al dedo aquel viejo dicho de que, además de cornudos, apaleados.