Nuevo Prepósito general de los Carmelitas Descalzos.

El nuevo superior, con hábito y barba, hace la profesión de fe ante el saliente que está de paisano. En un momento verdaderamente importante para la Orden.

Fray Saverio Cannistrà es un italiano de 50 años y sustituye al español Luis Aróstegui, de 70 años, que no fue reelegido. Me parece positivo que vista hábito y que sepamos que no oculta su nombre tradicional. Saverio Cannistrà del Sagrado Corazón. Del deshabitado saliente no hay la menor constancia de que sea de la Madre de Dios, del Santísimo Sacramento o de las Once mil Vírgenes. La verdad es que de él no hay constancia de nada. Supongo que el 99,9% de mis lectores jamás han oído hablar de Luis Aróstegui Gamboa. Tan olvidado como él tiene a su hábito carmelita.

Había sucedido al mejicano Camilo Maccise que fue, y supongo seguirá siendo, una auténtica desgracia para la Iglesia y para la Orden. Ultraprogresista y liberacionista su elección por los carmelitas fue considerada por no pocos como un reto a la Santa Sede, molestos como estaban los frailes por la aprobación de las "maravillosas". Pues esta joya fue elegida tres años después presidente de los Superiores religiosos. Juan Pablo II lo ignoró completamente y tenía vetado su acceso al Vaticano.

Esperemos que el P. Javier Cannistrà del Sagrado Corazón sea muy distinto del impresentable Maccise y del ignoto Aróstegui. No es buen síntoma que hayan designado los carmelitas para formar parte del Consejo de Presidencia de la Orden al mencionado Maccise. Lo que podría interpretarse como un empeño en lo peor. Esperemos a ver como se va retratando el nuevo Padre General.

Y se me ha perdido una referencia que me dejó perplejo. Como no la encuentro no sé si ha sido una alucinación o si es realidad. Me pareció ver que en las reuniones de Fátima, donde se celebró el Capítulo, estaba, en concepto de no sé que, Juan de Dios Martín Velasco. Que si ha ingresado últimamente en la orden carmelitana no me había enterado. Si han llevado a este cura de 75 años como asesor áulico estamos ante otra noticia preocupante. Seguramente no tendrá nada que ver con la realidad y sólo fue un espejismo fruto de un whisky.
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