BAUTIZAR NO ES PONER A REMOJO




01. RELATO DE REVELACIÓN
Tanto el relato del Bautismo de Jesús como el de la Transfiguración, (Mt 17,8) son narraciones en las que se nos presenta a Cristo como expresión de Dios: “Este es mi Hijo amado”.Son relatos de Revelación.

Los dos acontecimientos: BAUTISMO Y TRANSFIGURACIÓN, están elaborados con elementos simbólicos comunes provenientes del Antiguo Testamento: los cielos que se rasgan o se abren, la nube, la paloma: el Espíritu, la voz que surge, la expresión: éste es mi Hijo.

El Bautismo de Jesús supone el comienzo de la actividad pública de Jesús

Por otra parte, tanto el Bautismo de Jesús, como la Transfiguración, reflejan la experiencia que aquellos primeros cristianos, tienen de Jesús. que es la Palabra: Éste es mi hijo amado, escuchadle.

Lo más importante que un padre puede decirle a su hijo es que le quiere. Es lo que Dios dice a Jesús: eres mi hijo amadoo.
Y como dice la mística: En diciendo Jesús, Dios no tiene más que decir.

02. BAUTISMO DE JESÚS.

Entre el nacimiento de Jesús y su bautismo hemos de pensar que pasaron unos treinta años, muchos años.

Esos años los podemos llenar con lo que nos dice San Lucas: Jesús fue creciendo físicamente, en sabiduría y en aprecio (gracia) de Dios y ante los hombres, (Lc 2,52).

Es decir, Jesús no fue “extraterrestre”, que “se lo sabía todo”, sino que Jesús fue creciendo y aprendiendo
, en la sinagoga, durante algún tiempo Jesús fue discípulo de los grupos que su primo, Juan Bautista, “llevaba” en el Jordán. Jesús fue tomando conciencia de su ser y de su tarea mesiánica.




03. CUANDO LA GEOGRAFÍA SE HACE TEOLOGÍA.
LAS AGUAS BAUTISMALES DEL JORDÁN


La depresión del río Jordán es de unos 400 metros. (Es la mayor depresión geográfica del mundo).
Podemos pensar que, quien ni tuvo, ni se hundió personalmente en la profundidad del pecado, descendió a nuestras depresiones, y nos liberó.

San Pablo lo dirá de otro modo: Jesús, siendo de condición divina, se despojó de sí mismo y se hizo uno de nosotros, se hizo uno de tantos. (Flp 2,6-7)

Jesús no solamente se hace hombre, sino que se hace pecado. Durante toda su vida Jesús será amigo de pecadores y publicanos. Jesús se sumergió en las “aguas turbulentas”, en los “bajos fondos” de la humanidad.

Benedicto XVI hizo una lectura hermosa de este pasaje en su libro “Jesús de Nazaret”
Jesús había cargado con toda la culpa de la humanidad: entró con ella en el Jordán.

El Jordán evoca el mar Rojo, el éxodo, la liberación. El bautismo en el Jordán es el comienzo del nuevo Éxodo de la liberación definitiva.

También hoy los humanos somos siempre limitados, a veces como
Pedro nos hundimos en las aguas del mar de la vida. También en esas situaciones y en las peores condiciones somos hijos amados de Dios

LOS CIELOS SE ABRIERON

En una plegaria Eucarística se lee aquello de que: cuando por desobediencia perdimos tu amistad no nos abandonaste … ¿Y quién nos dice a nosotros que perdimos la amistad de Dios, que se enfadó y nos retiró su amistad? No es muy cristiana esa afirmación, porque Dios nunca ha cesado ni cesará de amar a sus hijos.

Sin embargo en la Biblia se dice que los cielos estaban cerrados para el ser humano. Es un modo de hablar. Por Cristo (Bautismo y Transfiguración) se abrieron, se rasgaron los cielos.

Por otra parte el viejo sistema, la vieja religión, el velo del Templo se rasgó con la presencia de Cristo, en el Jordán, en la Transfiguración y en la muerte de Xto. (Mt 27,50).

SE ABRIERON LOS CIELOS. No es que se abrieran las taquillas del cielo, sino que los cielos se abren y desciende el espíritu de amor sobre nosotros. Con la presencia de Cristo el amor de Dios “desciende de los cielos” sobre la humanidad. La casa de Dios Padre está abierta.

EL ESPÍRITU DESCENDIÓ SOBRE JESÚS:
El Espíritu nos retrotrae a la primera creación y a la historia de la salvación:

o El Espíritu de Dios se cernía creativo sobre las aguas iniciales (bautismo), (Gn 1,2).

o La paloma se cernía sobre las aguas bautismales del diluvio (Gn 8).

o Dios como un águila (paloma) potente llevó a su pueblo por las aguas bautismales de la libertad (Mar Rojo / Éxodo). (Ex 194).

o El mismo Espíritu que descendió sobre su madre, María, sobre Isabel... para crear vida.
o El Espíritu que resucitó a Jesús de la muerte.


04. BREVES CONCLUSIONES:
o Que JesuCristo es hijo amado de Dios significa que Dios le quiere. Dios es amor. Y en JesuCristo, Dios nos ama a todos.

o Ser cristiano en consecuencia es ser y sentirse hijo amado de Dios y esta condición de hijos amados no nos la quita nadie nunca. (el hijo pródigo es hijo amado). A todos nos ama Dios.

o Dice Francisco en su Exhortación respecto de la Eucaristía en referencia a las personas que andan (o andamos en las “zonas límite”:
Todos pueden participar de alguna manera de la vida eclesial, y tampoco las puertas de los sacramentos deberían cerrarse por cualquier razón. Esto vale sobre todo cuando se trata del sacramento que es “la puerta”, el Bautismo. La Eucaristía … no es un premio para perfectos sino un generoso remedio y un alimento para los débiles. (n 47).

MIENTRAS ORABA ... SE ABRIERON LOS CIELOS ... EL ESPÍRITU DESCENDIÓ ... UNA VOZ ... “ESTE ES”

MIENTRAS ORABA...

Para escuchar en la vida, para escuchar la Palabra, la Revelación hace falta silencio y oración.

Vivimos con demasiado
ruido. Para escuchar la voz, la Palabra, la propia conciencia nos hace falta silencio y orar.
Escuchar es una actitud personal de acogida de lo que los otros o “el totalmente Otro” me dicen.
ESTE ES MI HIJO AMADO, ESCUCHADLE
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