ESTRELLA y HERODES




“Estrellas y figuras” -más bien ídolos- hay muchos, y en todos los campos: en política, en la farándula del espectáculo, en el deporte, en los eclesiásticos, etc. Pero a esos no hay que adorar: solamente adorarás al Señor tu Dios.

El relato de los Magos tiene un doble movimiento:

“LOS DEL PARTIDO Y LOS QUE NO LO SON”:
El poder y los magos -extranjeros- han visto brillar la luz de la estrella en la noche de la vida. Los “gramáticos” -que esa es la palabra que usa el evangelio, para designar a los sacerdotes y escribas, a los “ingenieros del Obispado” de Jerusalén- también llegaron a la misma conclusión de que la estrella había de aparecer en Belén. Pero la lectura del mismo hecho es bien diferente.

01. MATEO: UN EVANGELIO PARA CRISTIANOS DE ORIGEN JUDÍO
Quienes escuchaban estos relatos del evangelio de Mateo, provenían del ámbito judío, eran de tradición judía. Por tanto sabían que el Mesías tenía que ser judío y para los judíos.

Por eso Mateo tiene mucho cuidado en dejar bien claro (luz) en este “power point” bíblico, que el relato de los magos, la estrella en la noche de la vida ha amanecido para toda la humanidad. Jesús es universal.

Extrañamente Herodes, rey de los judíos, no sabe dónde ha nacido el rey de los judíos, ni dónde ha nacido la luz.

Unos magos de Oriente (Oriente es donde sale el sol, la luz), unos paganos y extranjeros son quienes han visto el amanecer de la historia, la estrella.

02. LA LUZ, LA VERDAD, SON UNA INCASABLE BÚSQUEDA.

El ser humano lúcido y que ama la verdad la busca infatigablemente. Se podría decir que somos una búsqueda de la verdad, de la luz.
Caigamos en cuenta de lo importante que es la luz (la verdad) en nuestra vida: cuando nacemos, nos dan a luz y cuando morimos alguien orará por nosotros: concédele, Señor, la luz.

La verdad es una búsqueda diaria. La verdad no se tiene como quien tiene un libro, sino que todos los días hemos de salir a la plaza pública de la historia, de la política, dela cultura, de la teología para ver si hallamos un fragmento de expresión de la verdad, del bien y de la belleza.

Dios nos libre de quien cree tener la verdad absoluta en sus manos, porque es tocar a vísperas de fundamentalismos fanáticos e intransigencias con las consecuencias racistas, violentas, religioso-inquisicionales que ello supone. ¿O no lo estamos viendo con harta frecuencia en alguna religión y en el seno del mismo catolicismo? ¿Qué otra interpretación tiene el enfrentamiento de algunos cardenales al papa Francisco y la actuación obsesiva de algunos jerarcas?

La búsqueda es motivo de alegría y serenidad. El fanático fundamentalista tiene un miedo espantosos en su interior, una angustia les invade.

El amor y la búsqueda de la verdad es causa de:
 ALEGRÍA porque nuestra vida es un caminar hacia Dios (moralinas de segunda división aparte).
 SERENIDAD porque muchas veces nos “desesperamos” ante la situación de descristianización, de ocaso cultural, y pensamos que todo se viene abajo. También hay búsquedas en las corrientes de agua de nuestro tiempo, de nuestras universidades, de nuestras gentes y jóvenes.
La verdad es camino y búsqueda, no posesión fanática. El que busca, duda, se confunde, camina no es ateo, sino que es como los Magos: amante de la verdad.

03. HERODES Y LOS MAGOS.
El poder no ama ni le importa la verdad, sino que le interesa su establishment. La obsesión de los dirigentes es el poder, no la verdad.
Cínicamente el poder dice buscar la verdad (al niño): decidme qué hay del niño para adorarlo, pero en el fondo lo que el poder pretende es la matanza de los inocentes, que hoy se llaman: los refugiados y emigrantes, los de la valla de Melilla y las pateras, los niños soldado, niños explotados, el eterno problema de Siria, el hambre y las enfermedades en el mundo, etc…

04. SE LLENARON DE INMENSA ALEGRÍA.
La luz, la honradez en la vida, el “jugar limpio” causa una gran alegría interior. El fundamentalista fanático es una persona angustiada, con miedos dignos de Freud.
Probablemente quien tiene experiencias del amor, no es fanático, no puede ser fundamentalista.
El que busca, ama y confía en hallar la verdad camina humildemente con el sextante de las estrellas y oteando el horizonte.

Como los Magos, vivamos llenos de alegría en la luz.
Y volvamos a casa por otros caminos.


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