Los amantes del dinero

Jesús ponía en guardia a sus oyentes del peligro del amor a las riquezas: “Si quieres ser perfecto ve, vende lo que tienes y dáselo a los pobres. Así tendrás riquezas en el cielo. Luego ven y sígueme.Os aseguro que difícilmente entrará un rico en el reino de los cielos. Os lo repito: le es más fácil a un camello pasar por el ojo de una aguja que a un rico entrar en el reino de Dios Al oírlo, sus discípulos se asombraron más aún, y decían: Entonces, ¿quién podrá salvarse?” (Mt 19,16-24).
El Papa Francisco no se cansa de advertir del peligro del amor a la riqueza y de la necesidad de poner atención a los que viven en la periferia. Seamos cuidadosos con los bienes que Dios pone en nuestras manos porque no somos dueños de ellos sino sólo administradores. Texto: Hna. María Nuria Gaza.