Khalil Gibran, poeta del siglo XXI

Fallecido en Nueva York a sus 48 años, cuatro días antes de la proclamación de la Segunda República española (10 de abril de 1931), Khalil Gibran fue un poeta, ensayista, pintor libanés que sigue vivo en nuestro tiempo, acercándonos, como valiosas monedas de oro, sabios pensamientos, hermosas reflexiones líricas que, con elegante discrección, encienden una imagen, presiden un poema, confirman un discurso... Pocas veces nos llega el Khalil de las fecundas narraciones, los discursos filosóficos. Se acerca, como de puntillas, a nuestro corazón el poeta de las bengalas de sapiencia, de los relámpagos de cordura. Por cierto, que si queréis investigar por internet la obra de nuestro protagonista, conviene conozcáis los diversos nombres con que se le conoce: "Jalil Yibran" o "Khalil Gibran" (su nombre original en árabe) y "Kahlil Gibran" (en la transcripción al inglés).

Nacido en el Líbano en 1883, emigró a los 11 años a Estados Unidos. Pero su corazón permaneció siempre entre las gentes y los cedros de su primera patria, a donde regresó varias veces, sobre todo para mejorar su árabe.

He reencontrado estos días por mi biblioteca un pequeño gran libro "Palabras en silencio" (PPC 1997), del que es autor Kahlil Gibran. Se trata de una modesta antología de poemitas desparramados por revistas, periódicos, conferencias, correspondencia... Desgraciadamente, la edición no ha vuelto a repetirse. Me voy a permitir presentaros dos títulos que a mí me impresionan mucho y que muestran la habilidad literaria y psicológica de este genial conocedor del alma humana (se relacionó con Jung, y hasta le pintó un retrato).

DOS POEMAS DE KHALIL: "EL ASTRÓNOMO" Y "MISERIA"

Le atrajo siempre la espiritualidad de Oriente. Para Gibrán "toda la creación está dentro de ti, y todo lo que hay en ti está en la creación". Una gota de agua contiene todos los secretos de los océanos... Tan próximo al hinduismo, budismo, cristianismo, islam (hay un gran parecido en la vivencia trascendente de los místicos de todas la religiones), su metafísica identifica el Yo y el Absoluto. Estamos en contacto, sin límites, con las cosas más secretas... Palabras como Vida y Belleza, Gozo y Dolor, árboles, hojas, nubes, brumas...van sembrando de amor y espiritualidad la fecunda tierra de sus escritos. Curioso: de alguna manera se identifican con sus expresiones los creyentes de todas las religiones (esto sí que es Alianza de Civilizaciones), y hasta me atrevería a decir que muchos agnósticos se sienten interpelados por la magia profunda y sugerente de su pensamiento.


EL ASTRÓNOMO

A la sombra del templo
mi amigo y yo
vimos a un ciego, sentado aparte.
Y mi amigo dijo:
-Mira al hombre más sabio del mundo.
Me acerqué al ciego,
lo saludé.
Y empezamos a hablar.
Un poco después dije:
-Perdona una pregunta:
¿desde cuándo estás ciego?
-Desde que nací, contestó.
Dije yo: -¿Y qué rama de la sabiduría
cultivas?
Dijo: -Soy astrónomo.
Y apoyando la mano sobre el pecho
afirmó: -Escudriño estos soles,
y lunas,
y estrellas.


Si el poema anterior sugiere a los extrovertidos de Occidente que cierren un poco los ojos y descubran dentro la divinidad que son, en "Miseria" denuncia el materialismo de la sociedad capitalista, y hace pensar, con ingenio y provocación, que el dinero acaso no compre la felicidad:



MISERIA

El otro día vi
a un rico
de pie en la puerta del templo.
Tendía sus manos
llenas de piedras preciosas
a todos los transeúntes, diciendo:

-Tened compasión,
tomad de mí estas joyas.
Me han puesto el alma enferma
y me han endurecido el corazón:
piedad, tened piedad,
tomadlas,
haced que me cure.

Pero nadie le hacía caso.


Hemos sabido alguna vez, por la prensa, de excéntricos que sembraban a rebatiña dólares o euros, o se fumaban con ostentación billetes de banco de alto valor. ¿Estará loco este ricachón? ¿O simboliza la avanzadilla de una nueva sociedad construida sobre la alegría de ser, y no sobre la asfixiante coraza del tener? Cuando aquella mujer derrama un caro perfume sobre los cabellos de Jesús, los fariseos la critican. Pero ella, como este rico, se fue desprendiendo de aquello que le ataba el corazón y se sintió libre y feliz (Marcos 14, 3–9).

Si alguien siente curiosidad por asomarse a dos Presentaciones Power Point sobre los poemas "Los niños" y "El matrimonio" de Khalil Gibran, le sugiero pulsar aquí.
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