"Aparece en el sueño de Daniel: Bestias que someten con poder la tierra" El genocidio en Gaza: Bestia religiosa y bestia política

"El ataque de Hamás fue terrorismo injustificable. La respuesta de Israel reclama justamente la denuncia internacional: genocidio"
"El Gobierno de Israel debe aplicar sin reservas el derecho internacional humanitario en Gaza y Cisjordania"
"Dios juzga la historia, ya en el presente: “Ojalá escuchéis hoy la voz del Señor”"
"Dios juzga la historia, ya en el presente: “Ojalá escuchéis hoy la voz del Señor”"
| Jesús López Sáez, sacerdote-fundador de la Comunidad Ayala
Entendemos por genocidio la eliminación sistemática de un grupo social por motivo de raza, de religión o de política. Tras el ataque bestial de Hamás el 7 de octubre de 2023, en el que murieron 1200 israelíes, entre ellos 36 menores de edad, los ataques bestiales de Israel han provocado 67.200 muertos, un tercio de ellos niños, y 169.890 heridos. En ese contexto, centenares de miles de personas salen a la calle en más de 70 ciudades españolas para exigir el fin del genocidio palestino (04/10/2025).
Datos previos. Situamos a Gaza dentro de Palestina.
El término Palestina viene del antiguo pueblo de los filisteos (Philistea) que se asentó en Canaán en el siglo XII a. C. Las tribus hebreas forman una confederación testimoniada hacia el 1210 a. C. La estela del faraón Merneptah cita a los “hijos de Israel” como uno de los pueblos vencidos en su campaña de pacificación. Hacia el 930, tras la muerte de Salomón, el reino se divide en dos: Israel, reino del norte, y Judá, reino del sur. El año 721 cae el reino de Israel ante Salmanasar, rey de Asiria. El año 587 cae el reino de Judá ante Nabucodonosor, rey de Babilonia. En la foto, Palestina después del destierro (538).

El año 70 d. C. las tropas romanas del general Tito toman Jerusalén, destruyendo la ciudad y el templo. El imperio romano da el nombre de Palestina a la provincia de Judea. Hacia el año 638 los musulmanes llegan a Palestina, que estaba bajo la dominación bizantina. Vienen de Arabia, la cuna del Islam, e imponen la dominación árabe. Durante el siglo XIX, la población de Palestina habla árabe.
Un hogar para el pueblo judío.
En 1917, fecha en la que Palestina estaba bajo el mandato británico, el Gobierno del Reino Unido publicó un documento conocido como Declaración Balfour, en el que se mostraba su apoyo al “establecimiento en Palestina de un hogar nacional para el pueblo judío”. A partir de ese momento comenzaron las manifestaciones y reivindicaciones de los palestinos a favor de la independencia y contra la inmigración judía que empezaba a llegar y que daría lugar a actos de terrorismo y violencia de forma intermitente hasta nuestros días (ONU, La cuestión de Palestina, junio 2024).
Partición de Palestina.
La ONU se comprometió a encontrar una solución justa a la cuestión de Palestina y en 1947 la Asamblea General adoptó la Resolución 181, en la que se decidió dividir Palestina en dos Estados, uno árabe y otro judío, con la ciudad de Jerusalén bajo control internacional. Un 56% sería para el nuevo Estado judío, que se convirtió en Israel, y un 42% sería para un Estado árabe palestino. El Estado árabe palestino consta de dos regiones: Cisjordania (Samaría) y la Franja de Gaza, con Jerusalén Este como capital.
Guerra árabe-israelí.
Tras la partición de Palestina, Israel proclamó su independencia el 14 de mayo de 1948 e inmediatamente estalló la primera guerra árabe-israelí, en la que Israel se hizo con el 23% del territorio asignado a los palestinos. La Nakba, la “catástrofe palestina”, supuso la expulsión de 700.000 palestinos, la destrucción de más de 500 pueblos palestinos por las fuerzas israelíes, la negación del derecho palestino al retorno. Ese mismo año la Asamblea General de la ONU aprobó la Resolución 3236 en la que se reafirmaban “los derechos inalienables del pueblo palestino a la libre determinación, la independencia y la soberanía nacionales”.

En 1967, en la Guerra de los Seis Días, Israel “se apoderó de la Franja de Gaza y de los territorios palestinos de Cisjordania y Jerusalén Este”, “así como de los Altos del Golán de Siria y la Península del Sinaí de Egipto”. La ONU comenzó a hablar abiertamente de “territorios ocupados” y a condenar a Israel por esta “ocupación ilegal”. En la Resolución 242, el Consejo de Seguridad afirmó “la inadmisibilidad de la adquisición de territorio por medio de la guerra” y “la necesidad de trabajar por una paz justa y duradera”, y pidió “la retirada de las fuerzas armadas de Israel de los territorios ocupados”.
El Estado de Palestina.
En 1975 la Asamblea General creó el Comité para el Ejercicio de los Derechos Inalienables del Pueblo Palestino (INESPAL) mediante la aprobación de la resolución 3376 y otorgó a la Organización para la Liberación de Palestina (OLP) la condición de “observadora”. En 1988, el Consejo Nacional de Palestina reunido en Argel proclamó “el establecimiento del Estado de Palestina”. El 29 de noviembre de 2012 la Asamblea General de la ONU reconoció a Palestina la condición de “Estado observador no miembro”, “en estos momentos son ya 146 -de los 193 Estados miembros de la ONU- los países que han reconocido a Palestina como Estado”, “España, Irlanda y Noruega se han unido recientemente” (ibidem).
Actualmente, once Estados han reconocido el Estado de Palestina, entre ellos, Francia, Gran Bretaña, Portugal y Bélgica (22/09/2025). Palestina forma parte de la Liga Árabe, la Organización para la Cooperación Islámica, y de agencias internacionales como la OMS, UNESCO, Interpol, FIFA, COI, Corte Penal Internacional. Tiene 5’5 millones de habitantes, de los cuales 2 millones están en la Franja de Gaza. Israel tiene unos 16 millones de habitantes.
Intifadas.
En 1987 comenzó un alzamiento masivo contra la ocupación de Israel conocido como la primera intifada, que se prolongó hasta la Conferencia de Madrid. Celebrada en 1991, fue una negociación que culminó en los Acuerdos de Oslo (1993) entre Israel y la OLP. En 1994 se creó la Autoridad Nacional Palestina. La segunda intifada empezó en septiembre de 2000 con la visita del político israelí Ariel Sharon a la explanada de las mezquitas de Jerusalén, lo que se interpretó como una provocación. La intifada terminó en febrero de 2005. Dejó más de 5.000 palestinos muertos, la mayoría civiles, y más de 1.000 israelíes muertos, la mayoría civiles. La tercera intifada fue en diciembre de 2017. Hamás convocó a los palestinos a un “viernes de ira” tras la decisión del presidente estadounidense Donald Trump de reconocer a Jerusalén como capital del Estado de Israel. Murieron dos palestinos y hubo más de 100 heridos.

Hamás y Fatah.
Hamás significa “fervor, entusiasmo”. Es una organización política y militar palestina, cuyo objetivo original en 1987 es el establecimiento de un Estado islámico en la región de Palestina con capital en Jerusalén. En general, ha sido declarada organización terrorista por los países occidentales. Otros países, como Rusia, Turquía, Brasil, China o Noruega, no la consideran así. Fatah significa “apertura, victoria”. Es una organización política y militar palestina, fundada en 1958 por Yasser Arafat, abierta a negociar con los israelíes, componente principal de la OLP.
Gobierno de unidad.
Tras la segunda intifada, en 2006 se celebraron las primeras elecciones palestinas desde 1996. Hamás, que había boicoteado las elecciones anteriores, consiguió la mayoría absoluta con 79 escaños frente a los 45 de Fatah. En septiembre se anunció la formación de un gobierno de unión nacional entre los dos partidos. Las negociaciones fracasaron y empezaron violentos enfrentamientos entre los militantes de Hamás y Fatah. Hamás acabó tomando el control militar y político de la Franja de Gaza en junio de 2007. Tras años de negociaciones se alcanzó un acuerdo de reconciliación el 23 de abril de 2014, que dio paso, el 2 de junio, a la formación de un gobierno de unidad presidido por
Mahmud Abbas.
El presidente declaró que el nuevo gobierno reconocía al Estado de Israel y mantenía su compromiso de buscar la paz con Israel. El 13 de agosto de 2020 se firman los Acuerdos de Abraham, un acuerdo de paz entre los Emiratos Árabes Unidos e Israel.
Ataque bestial. El 7 de octubre de 2023, mientras los israelíes celebraban un día de fiesta, la organización terrorista Hamás lanzó un ataque a gran escala contra Israel con el lanzamiento de cohetes y entrando en territorio israelí: “un ataque que se saldó con la muerte de 1200 ciudadanos israelíes y más de 200 secuestrados” (ibidem). Este ataque bestial llevó a Israel a declarar el estado de guerra y a comenzar una devastadora campaña de bombardeos.
Genocidio de Gaza.
Según datos proporcionados por el Ministerio de Salud de Gaza, los ataques israelíes han provocado 67.200 muertos, un tercio de ellos niños, y 169.890 heridos. “Israel ha cometido genocidio contra los palestinos en la Franja de Gaza”, afirma la Comisión Internacional Independiente de Investigación sobre los territorios palestinos ocupados (ONU), “urgiendo a Israel a cumplir sus obligaciones legales en virtud del derecho internacional para poner fin a tal atrocidad y castigar a los responsables”, “los acontecimientos en Gaza desde el 7 de octubre de 2023 no se han producido de forma aislada.

Fueron precedidos por décadas de ocupación ilegal y represión bajo una ideología que exigía la expulsión de la población palestina de sus tierras y su reemplazo” (16/09/2025). Hay que distinguir entre pueblo de Israel y Estado de Israel, también entre Estado de Israel y responsables del genocidio. “Aun contemplando el derecho a la legítima defensa ante un atentado atroz, nada justifica el uso indiscriminado de la violencia contra la población civil que no se ajusta a derecho y carente del más mínimo signo de humanidad” (Vida Nueva, 20-26/09/2025).
Detengan esa masacre.
Sin citar la palabra genocidio, el rey Felipe VI pronunció ante la ONU estas palabras: “No podemos guardar silencio ni mirar hacia otro lado ante la devastación, los bombardeos, incluso de hospitales, escuelas o lugares de refugio, ante tantas muertes en la población civil o ante la hambruna y el desplazamiento forzoso de cientos de miles de personas”, “son actos aberrantes”, “repugnan a la conciencia humana y avergüenzan al conjunto de la comunidad internacional", “por eso clamamos, imploramos, exigimos: detengan ya esa masacre”, “condenamos rotundamente el execrable terrorismo de Hamás, pero con la misma fuerza demandamos que el Gobierno de Israel aplique sin reservas el derecho internacional humanitario en toda Gaza y Cisjordania” (24/09/2025)-
Bestia religiosa y bestia política.
Ciertamente, el ataque de Hamás fue bestial, terrorismo injustificable. La respuesta de Israel, también bestial, reclama justamente la denuncia internacional: genocidio de Gaza. No podemos callar. ¿Qué ves en la noche? Dinos, centinela (Is 21,11). Bestias que someten con poder la tierra, desgarran, devoran, asolan, blasfeman y muchos repiten: ¿Quién como la Bestia? (Ap 13,4). Aparece en el sueño de Daniel: el “hijo del hombre” es sacrificado por poderes bestiales (Dn 7).
Como se dice en el Apocalipsis, la bestia religiosa se pone al servicio de la bestia política: “Vi una bestia que salía del mar”, “abrió su boca para blasfemar contra Dios”, “vi otra bestia que salía de la tierra; tenía dos cuernos como de cordero, pero hablaba como una serpiente”, “hace que la tierra y todos sus habitantes adoren a la primera bestia” (Ap 13, 1-12). Está escrito: “No tomarás el nombre de Dios en vano” (Ex 20,7), “por vuestra causa el nombre de Dios es blasfemado entre las naciones” (Rm 2,24). De nada sirve la falsa seguridad religiosa: “¡Ay de los que se fían de Sion!… y no se duelen del desastre de José” (Am 6,1-6), el desastre del hermano (Gn 37, 20-28). No sólo no se duelen, lo provocan: “Os pediré cuenta” (Am 3, 2).
Últimas noticias.
Plan del presidente de Estados Unidos Donald Trump para Gaza: alto el fuego, entrega de rehenes en 72 horas y una junta de paz para gestionar la Franja de Gaza (29/09/2025). El primer ministro israelí Benjamín Netanyahu niega haber acordado con Trump la creación de un Estado palestino. El plan de Trump “sirve a los intereses de Israel” e “ignora los del pueblo palestino”, dice un dirigente de Hamás a la BBC. En realidad, el plan de Trump para Gaza es “un proyecto de dominación colonial y ocupación permanente”: “entrega Gaza a Trump como supremo gestor”, “plantea un modelo de dominación para Gaza, coordinado por Estados Unidos, la potencia que más ha facilitado el genocidio”, “separa el futuro de Gaza de Cisjordania”, “no ofrece rendición de cuentas para los perpetradores del genocidio ni reparación para las víctimas de los crímenes masivos”, “diseña una ocupación transitoria con posibilidad de ser permanente” (elDiario.es, 30/09/2025). Al menos 23 personas, entre ellos un niño y un periodista, mueren en Gaza por bombardeos israelíes (01/10/2025).
Más noticias.
Hamás acepta liberar a los 20 rehenes vivos y entregar los cuerpos de 32 muertos a cambio de la liberación de presos palestinos. También acepta renunciar a la administración de Gaza para que quede en manos de tecnócratas palestinos (03/10/2025). Tras enviar un ultimátum a Hamás para que acepte su plan antes del domingo por la noche, Trump afirma: “Israel debe detener inmediatamente el bombardeo de Gaza para que podamos sacar a los rehenes de manera segura y rápida” (04/10/2025). Israel y Hamás se citan para negociar en Egipto. La organización palestina denuncia 131 ataques aéreos y de artillería en la Franja de Gaza con más de 90 muertos durante el fin de semana. Trump afirma que ha acordado con Israel su retirada parcial de Gaza como paso previo a la liberación de rehenes (06/10/2025).
Crece la presión sobre Netanyahu para llegar a un acuerdo y el 63% de los israelíes pide su dimisión (07/10/2025). Israel ratifica el acuerdo sobre la primera fase del plan de paz. Hamás afirma que Estados Unidos y los mediadores les han dado garantías de que la guerra ha terminado. Un ataque israelí deja a 40 personas atrapadas bajo los escombros (10/10/2025). 6.000 camiones con ayuda humanitaria esperan entrar en Gaza. Israel libera 1950 presos palestinos (11/10/2025). Trump asegura que la guerra ha terminado. Hamás entrega a Israel los 20 rehenes vivos (13/10/2025). El plan de Trump para la Franja de Gaza: “Una propuesta realista”, dice el papa León XIV (Vida Nueva, 4-10/10/2025).

Escribe la visión.
En la reunión de la comunidad el 4 de octubre, coincidiendo con la manifestación por Palestina, leemos la lectura propia del día. Es del profeta Habacuc. En diálogo con el Señor manifiesta su queja: “¿Hasta cuándo clamaré, Señor, sin que me escuches, te gritaré: ‘Violencia’ sin que me salves? ¿Por qué me haces ver desgracias, me muestras trabajos, violencias y catástrofes, surgen luchas, se alzan contiendas?”. Dice también: “La ley se viola y el derecho jamás prevalece, los malvados asedian al justo y el derecho sale conculcado” (Hab 1,1-4).
El profeta denuncia la violencia y se queja por el silencio de Dios, pero espera en su palabra: “En mi puesto de guardia me pondré, me plantaré en mi muro, y otearé para ver lo que él me dice”. El Señor le respondió: “Escribe la visión, grábala en tablillas, de modo que se lea de corrido. La visión espera su momento, se acerca su término y no fallará; si tarda, espera, porque ha de llegar sin retraso. El injusto tiene el alma hinchada, pero el justo vivirá por su fe” (2,2-4). Se puede comprobar: “el injusto tiene el alma hinchada”, es arrogante, pero “el justo vivirá por su fe”. Dios tiene la última palabra sobre la historia humana, Dios juzga la historia, ya en el presente. Decía el salmo propio del día: “Ojalá escuchéis hoy la voz del Señor, no endurezcáis vuestro corazón” (Sal 95).
Diálogo
El ataque de Hamás fue terrorismo injustificable.
La respuesta de Israel reclama justamente la denuncia internacional: genocidio.
Son crímenes de guerra, crímenes de lesa humanidad.
El Gobierno de Israel debe aplicar sin reservas el derecho internacional humanitario en Gaza y Cisjordania.
Hay que distinguir entre pueblo de Israel y Estado de Israel, también entre Estado de Israel y responsables del genocidio.
Se cuestiona el silencio de Occidente, el silencio de Europa.
Se cuestiona el silencio de la Iglesia, de las Iglesias cristianas.
Aparece en el sueño de Daniel: Bestias que someten con poder la tierra.
La bestia religiosa se pone al servicio de la bestia política.
Está escrito: “No tomarás el nombre de Dios en vano”, “por vuestra causa el nombre de Dios es blasfemado entre las naciones”.
De nada sirve la falsa seguridad religiosa: “Os pediré cuenta”.
Los malvados asedian al justo y el derecho sale conculcado.
El injusto tiene el alma hinchada, es arrogante.
El justo vivirá por la fe.
Dios juzga la historia, ya en el presente: “Ojalá escuchéis hoy la voz del Señor”.

Etiquetas