Dios asciende con júbilo

god-gone-purcell

¡Feliz miércoles! Para esta semana de después de la Ascensión, qué mejor que una música que hable de este bello tema: Cristo sube al cielo, pero nos deja el Espíritu Santo para consolarnos y darnos aliento. La composición de hoy sabrá tan a poco que tendremos que escucharla varias veces.

henry-purcell

El maestro que nos visita hoy no es otro que Henry Purcell (1659-1695), maestro británico nacido en Westminster (Londres). Fue considerado el compositor más original de su época. Estudió con John Blow a quien sucedió como organista en la Abadía de Westminster. Además de trabajar para instituciones reales, Purcell se dedicó a componer óperas y música incidental (es decir, la que acompaña a una obra escénica). Puede decirse que no hay género musical que Purcell no explorara. Algunos de sus himnos (en inglés anthems) son cantados todavía por la Iglesia anglicana. Compuso una gran cantidad de canciones y solo ellas son suficientes para asegurarle un lugar en el olimpo musical. Siempre fue un maestro muy atento al texto subyacente. Para palabras maravillosas, Purcell escribía notas maestras.

La pequeña obra suya que vamos a escuchar hoy es el salmo God is Gone Up With a Merry Noise, Z.107. Tiene texto del versículo 5 del salmo 47 y es una composición a siete voces. Algún experto ha afirmado que es una obra que pasa en un instante y no es probable que Purcell tardase mucho tiempo en componerla. Efectivamente, la pieza dura poquísimo más de un minuto, pero en ella Purcell no desaprovecha la oportunidad para imitar incluso a la trompeta a la que se refiere el texto. Un bombón de la más alta calidad.

La interpretación es de The Sixteen dirigidos por Harry Christophers.

Volver arriba