Salve, estrella del mar
¡Feliz sábado! Poco a poco hemos llegado a este último sábado del mes de mayo y para este día te propongo disfrutar de una música que ha sido casi compuesta ayer, podríamos decir. Ya hemos comprobado varias veces cómo la música contemporánea tampoco tiene que ser complicada de escuchar sino que a veces es muy complaciente con el oído, frente a otras que son realmente ingratas. La de hoy promete un buen rato de disfrute, como comprobarás si te quedas un momento por aquí.
Disfrutemos hoy de su antífona Ave Maris Stella. Fue compuesta en 2014 para coro a cinco voces y fue un encargo de la Sociedad Ricardo III, George Haynes y Saint Peter's Singers. La métrica muy medieval del himno no ha sido un inconveniente para Park se fijase en ella. Conserva dicha estructura en vez de camuflarla y la rodea de una melodía (reminiscente de Grieg, según dice) sobre una armonía que casi parece salida de la mano de Poulenc. La obra alcanza su clímax justo antes de un luminoso amén final.
La interpretación es de Gabrieli Consort dirigido por Paul McCreesh.