María-José PEÑA

Ayer a las 17:18 · 

LOS TRES GESTOS

Pues el gesto que ERC esperaba de la Abogacía del Estado, ya se ha hecho.

Y se ha hecho con cuidado, con mimo, con esmero para complacer.

Y, no sólo eso, antes se les ha facilitado copia por si les parecía suficiente el gesto o bien hubiera que rectificar algo.

A ERC le ha parecido bastante, así que la Abogacía del Estado, comandada por las directrices marcaditas de Sánchez y los suyos, ya no tiene que hacer nada más, de momento, en defensa del interés de quien ha sido condenado por el TS por sedición. Su formación, que por disparate de nuestras Leyes, está presente en el Parlamento de la España a la que quiere destruir, está dispuesta a cambio a abstenerse para que Sánchez culmine su sueño de ser un Presidente del Gobierno “legal”, y no el asaltador que ha sido hasta ahora o el Presidente electo incapaz de conseguir apoyos para ser investido, que también ha sido.

Y es que el Presidente del Gobierno en funciones se vale de todo, no reconoce freno en nada, pacta con ERC este “gesto” de la Abogacía y no sabemos cuantas cosas más, todas en secreto, todas en detrimento de la cohesión de España y de la igualdad de los españoles.

Lo grave es que la posición que acaba de sostener la Abogacía del Estado cobra importancia no tanto por la posición jurídica que expresa respecto a la situación de Junqueras sino porque lo que expresa de verdad es otra cosa de calibre mayor: que dicha Abogacía deja de ser del Estado para convertirse ni siquiera en la del Gobierno sino en la del propio Sánchez. A esto hemos llegado.Ya ven, Sánchez tiene sus propios abogados al servicio de su causa: atrincherarse en la Moncloa. Otros abogados del Cuerpo estarán ofendido y humillados, pero quien manda, manda, y manda para su conveniencia, que no quepa duda. El siempre lo ha entendido así: la Abogacía del Estado “es” del Gobierno y por tanto la usa a conveniencia. Tan interiorizado tenía esto, que ni se retuvo a la hora de decirlo públicamente durante la campaña electoral. Sólo el escándalo que produjo su verbalización entre los que también lo sabían, le obligó a guardar algo las formas rectificando al día siguiente y atribuyendo la claridad de la expresión primera al cansancio de la campaña.

Pero bueno, ahora ya, sin cansancio, el hombre vuelve a lo que realmente es su sentir y su hacer.

Pero hay un segundo gesto: el PSOE de Pedro Sánchez, a cambio de los votos del PNV que también precisa para sortear con éxito la investidura. Se compromete con el PNV a “las reformas necesarias para adecuar la estructura del Estado al reconocimiento de las identidades territoriales, a fin de encontrar una solución tanto al contencioso en Cataluña como en la negociación y acuerdo del nuevo Estatuto de la CAV, atendiendo a los sentimientos nacionales de pertenencia”. Punto 4 del Acuerdo. ¡La disolución del Estado!.

Y pactaría con el diablo si el diablo pudiera ayudarle a atrapar su demente sueño: la Moncloa. ¡Ay, si pudiera ser para siempre!.

Pero, visto esto y vista también su predisposición a no vincularse a nada de lo dicho, tampoco de lo firmado, una vez que la investidura dé paso al nuevo Gobierno con Pablo Iglesias de Vicepresidente…¡Qué nos aguarda!. ¿Serán capaces juntos de desmontar lo que queda en pie de la España que conocemos, o la ambición de cada uno tirará por su lado enfrentándoles de la manera más bochornosa, como hemos visto atisbos en meses anteriores?. ¿Llegarán a las manos?.

Pues miren, no lo sé, muy capaces son de todo, pero para no llegar a todo ello yo pido desde aquí otro “gesto”. Y se lo pido a los 119 Diputados del PSOE, descontado Pedro Sánchez.

Y lo que les pido es que reflexionen, que salvados ya por Pedro Sánchez todos los obstáculos que pudieran habérsele opuesto, la solución está ahora en ellos, en sus manos de Diputados representantes de todo el pueblo español.

Les pido que olviden los errores que ellos mismos u otros hayan podido cometer; les pido que recuerden que son socialistas, no sanchistas; que no manchen su condición; que ya que el azar o la parálisis de los demás les ha colocado en situación de ser el último recurso, voten NO en la investidura.

Y la voten en número bastante de NOES como para salvar el país y la dignidad de todos; la suya, también.

Tienen en sus manos la oportunidad única de ser nuestros héroes, el comienzo de un nuevo socialismo; de abrir las puertas a una España nueva que deje atrás la degradación política a que la han arrastrado muchos de los políticos de las últimas décadas.

Así que, no teman, decídanse, den una lección a todos, obren como socialistas de convicción y de acción, obren como patriotas españoles, ¡digan NO!.

Fuente: María-José PEÑA:LOS TRES GESTOS

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