No me gusta meterme con los jesuitas, pero creo que meterme contra un medio jesuita y más cuando se que los jesuitas le tienen poco aprecio no me parece motivo como para que enfade a los jesuitas.

Resulta que el Jesuita (si es que se le puede considerar aún así) Martínez Camino va diciendo tonterías con intenciones extrañas y oscuras. La última asegura que España camina hacia un estado totalitarista. Me van a tener que decir como será eso posible, y más en una democracia y gobernado por un blandengue. Si nos gobernase Paco el Rana entonces otra cosa yo diría. Pero si gobernando Aznar defendí ante amigos muchas de las buenas gestiones de Aznar y critique a ese director de cine, Almodóvar, que aseguró un posible golpe de estado, como no voy a defender al gobierno socialista de semejante mentira perpetrada por alguien que debiera ser una autoridad moral como el Secretario de la Conferencia Episcopal.

Martínez Camino tiene mala fama entre los jesuitas. Me ha contado un amigo exjesuita y profesor en una universidad de los jesuitas, que Juan Antonio Martínez Camino levantó sospechas entre varios de sus compañeros por chivatazos verdaderos o falsos a sus superiores sobre lo que hacían o decían otros compañeros jesuitas. Por lo que he oido, se hacia amigo de todo el que podía, te pedía tu opinión en diversos temas y al poco tiempo te venían problemas porque alguien había filtrado tus opiniones a un superior.

A Martínez Camino le cerraron la puerta de ascensos en la Compañía de Jesús, en ese momento decidió seguir sus ambiciones, ello le llevó a ser un caso de Jesuita no sujeto casi a la disciplina de la Compañía de Jesús. Según me han contado, hubo comentarios ante algunos jesuitas que llegaron a insinuar que era todo por una posible mitra que podría recibir, pero desde entonces y hasta hoy nada ha ocurrido.

Mi compañero blogger Francisco José Fernández de la Cigoña lo ha descartado en numerosas ocasiones, y dado que en asuntos episcopales anda bien informado doy por seguro que Martínez Camino lo tiene realmente crudo para conseguir una mitra. Concluyo el post con unos versos de mi compañero, versos dedicados a Martínez Camino y que ojalá los tenga en cuenta el nuncio.

Qué anhelas solideo,
ya lo veo.
Aunque si por mí fuera,
no lo hubiera.
Qué valorarse tanto,
Causa espanto.
Y más siendo comino
Que camino.
Mas si para el condón
No hay perdón.
Volóse el obispado.
Desdichado.
Así que, jesuita.
Es tu cuita.
O regresar a Dueñas
Por más señas.
Ibas encaminado.
No has llegado.
Y si alguien te repesca,
Habrá gresca.
Que hay muchos enemigos.
Más que amigos.
Los que tú te has buscado.
Y encontrado.