La sexualidad de Cristo.

Yo recomendaría a algunas personas del campo de la teología que por favor no se aburrieran más. Es improductivo y poco útil dedicarse a mirar si Cristo fue homosexual o no lo fue. No hay nada que lo pruebe o lo demuestre y además eso importa bien poco.

Por aburrimientos teológicos ya le levantaron las faldas a la Virgen para rebuscarle un himen intacto. La mente de algunos teólogos de entonces no les permitía entender el concepto de virginidad sin himen, y al final quisieron hacer consistir su virginidad en que el himen estaba intacto. Si, hay teólogos aburridísimos, los ha habido, y los habrá.

Ruego a Jaime Vázquez Allegue que no se aburra. Mire usted, yo soy favorable al matrimonio gay y tengo mucho contacto con colectivos LGTB. Amigos gays tengo, pero eso ni sirve a su causa ni les va a traer ninguna pastoral porque Jesucristo en vida no dejó sobre el tema absolutamente nada. Vale más para las pastorales esas frases que decía a sus discípulos de:

“Amaos los unos a los otros como yo os he amado”


Y entre sus discípulos había muchas mujeres, y no por ello seria ya bisexual. El amor de Cristo no es el de pareja, es creo yo (y tal vez me tilden los de siempre por hereje) el de hermano a hermano.

Siga en su línea y no escriba estas cosas, que especular con la sexualidad de Cristo no le va a aportar nada importante ni a usted ni a nadie. Como no aportó nada el himen sin romper de Maria, pues aunque se hubiera roto habría seguido siendo virgen y la misma Madre de Dios de siempre.
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