Corpus de Cafarnaúm /2. La apostasía de los galileos (Jn 6, 60-71)

Esta es la más famosa de las apostasías bíblicas. Como hemos visto ayer (Jn 6, 1-59), un grupo de galileos han seguido a Jesús, han comido el pan de sus multiplicaciones y han querido coronarle rey, celebrando con él un gran Corpus regio, con gloria externa, comida, poder y reino. Pero Jesús les explica, en la sinagoga de Cafarnaúm, la verdad de su camino, la forma en que han de compartir con él y con los pobres su carne y sangre, poniendo su vida al servicio de los demás, y ellos, al  oír eso, le abandonan y apostatan. Lo que habían querido era pan multiplicado, era reino compartido. Este verdadero Jesús no les importa nada, le dejan y se van, uno por uno, en la misma sinagoga.

Al ver el signo. Jn 6,115 - ReL

Principio 

El trasfondo histórico de esta escena (y de otras sobre cambios de la comunidad del evangelio del Evangelio de  Juan, ha  sido estudiados por comentaristas que todos los exegetas conocen (Bultmann y Dodd, Cullmann y Brown, Mateos-Barreto,  Vidal, Zumsgtein, Beutler etc.…). No voy a repetir sus argumentos, sólo evocar el fondo de sus temas, indicando que aquella “apostasía de los Galileos” se parece, como un huevo a otro huevo, a la actual apostasía de occidente, que antes erateóricamente cristiano, por las mismas razones de los “galileos”.

Ellos buscaban pan (riqueza), reino (poder), milagros externos... Cuando Jesús muestra sus “cartas” y les dice claramente lo que quiere, lo que ofrecda y les pide, se van marchando todos.  No hay quizá una escena más “histórica”  y más clara en todo el Nuevo Testamento . Es como si el evangelio de Juan estuviera contando nuestra historia, el derrumbamiento de nuestra “iglesia galilea” (occidental, moderna). Hasta Pedro Parece implicado.

Lectura

Ruinas de la Sinagoga Blanca, Cafarnaúm - 87574 - Biodiversidad Virtual /  Etnografía

JN 6, 59 Esto lo dijo Jesús en la sinagoga, cuando enseñaba en Cafarnaúm. 60Muchos de sus discípulos, al oírlo, dijeron: «Este modo de hablar es duro, ¿quién puede hacerle caso?». 61Sabiendo Jesús que sus discípulos lo criticaban, les dijo: «¿Esto os escandaliza?, 62 ¿y si vierais al Hijo del hombre subir adonde estaba antes? 63El Espíritu es quien da vida; la carne no sirve para nada. Las palabras que os he dicho son espíritu y vida. 64Y, con todo, hay algunos de entre vosotros que no creen».  

 66Desde entonces, muchos discípulos suyos se echaron atrás y no volvieron a ir con él.  67Entonces Jesús les dijo a los Doce: «¿También vosotros queréis marcharos?». 68Simón Pedro le contestó: «Señor, ¿a quién vamos a acudir? Tú tienes palabras de vida eterna; 69nosotros creemos y sabemos que tú eres el Santo de Dios». 

Temática de fondo

             El “discurso eucarístico de la sinagoga (Jn 6, 1-59), con las escenas ayer vistas ha suscita una disputa eclesial, centrada en la comprensión de la carnalidad cristiana, eucarística, personal, comunitaria, y en el fondo divina…

- El ángel de la pascua de los dos evangelios anteriores (Mc 16 y Mt 28)  había pedido a las mujeres que dijeran a los discípulos y a Pedro que fueran a Galilea,  para encontrar allí a Jesús y retomar su evangelio.

Pero este pasaje de Jn 6 supone que los galileos han apostatado de Jesús: Querían el pan, querían poder… No supieron entende4r al Cristo que da la vida (cuerpo y sangre por los otros.  El mismo  Pedro y sus compañeros no han entendido  la novedad pascual y eucarística de Jesús

 (a) Pedro y los Doce deben superar un riesgo de espiritualismo gnósticoeso significa que tienen entender la comunión de y con Jesús en línea “carnal” (de encarnación), no de pura corporalidad espiritual.

(b) Al mismo tiempo, ellos deben superar un tipo de corporativismo judío, de comunión de cuerpo social, sin entrar en la carne y sangre de la ida concreta

Granadas, Granada, ...: Sinagoga de Cafarnaum

Carne y sangre de Jesús, vida compartida

Estas palabras centrales del discurso de Juan 6 ratifican y recrean el verdadero sentido de la carne y de la sangre (sarx, haima), esto es, de la palabra de Dios que se ha hecho carne (Jn 1, 14) para que los hombres entreguen, compartan, su carne y sangre unos con (por otros).  

No se trata, pues, de una comunión espiritualista de ideas o proyectos, sino una comunicación de carne (de carnalidad concreta de la vida) y de sangre ( de donación hasta la muerte). En ese contexto, la Iglesia posterior ha introducido en su credo los dos artículos fundamentales: Creo en la “comunión” (koinonía) de los creyentes y en la resurrección de la carne.

            Lo que Jesús dice de sí mismo lo dice no sólo de sí, sino de aquellos que le siguen, que han de compartir entre ellos y con ellos (con todos los hombres) la carne y sangre de su vida. Actualmente (2022) podemos comprender quizá mejor la actitud de aquellos ese mismo camino nos hallamos nosotros, que sentimos también dificultades para comprender este discurso de carnalidad eclesial, comida personal y vida compartida. Dejamos así que los lectores sigan penetrando en el misterio. 

Lectio Divina, Domingo 21 de agosto, 2016 | Biblia y Oración - ABP  Guatemala CEG

Apostasía de los galileos, apostasía de occidente.

Habían seguido a Jesús por conveniencia: Unos porque les daba de comer, otros porque le veían como garante de un tipo de sacralidad antigua, otros simplemente por tradición, por afán de poder, por algún tipo de visión mágica de la vida… porque querían ser reyes con él y vencer a los romanos (como gran parte de los galileos en la guerra del 67-70 d.C.

Pero de pronto, tras el “milagro” externo de la multiplicación de los panes y una experiencia (¿también externa?) de ayuda en la tormenta, tras haber escuchado el largo sermón sobre el pan de vida, muchos (polloi = todos) quedaron decepcionados y empezaron a marcharse, de forma que Jesús quedó prácticamente solo, con Doce discípulos al lado, y no todos dignos de fiar.

        Las circunstancias no son las mismas, pero actualmente (año 2022) estamos asistiendo (en la iglesia de Occidente) a un escenario y crisis semejante. Son muchos los que se van de la Iglesia, por motivos parecidos a los del discurso y crisis del “pan de vida” (del cuerpo y la sangre de los seguidores de Jesús). Será bueno trazar una comparación. 

En la sinagoga de Cafarnaúm escuchando a Jesús

 1.El narrador es el Discípulo amado, o alguien que habla a su nombre, recogiendo en su evangelio el sentido del pasado y futuro de la Iglesia, en el paso de la segunda a la tercera generación de cristianos. Ésta es una narración “interesada” (escrita desde una perspectiva eclesial, la de la comunidad del Discípulo amado, no la de Mateo o la de los sucesores de Pablo. Es una narración particular (una entre varias), pero fundamental para entender el pasado y presente de la Iglesia, pasando de la “multitud de Galilea” (que abandonan a Jesús) a la comunidad de los Doce (con Pedro), mirada desde la perspectiva del Discípulo amado. Ésta ha sido para muchos la mayor crisis de iglesia hasta el momento actual (año 2022).

2 .El Discípulo amado acepta el relato de las multiplicaciones, con la multitud de seguidores de Jesús en Galilea, buscando pan y poder político, pero las interpreta de un modo “crítico, como exigencia y principio de  transformación personal, de entrega de la vida de unos por (para) otros, como Jesus cuya carne es comida, cuya sangre es bebida para tos.  Es importante la comida multiplicada, como don para los pobres,  pero la comida sola no basta para entender a Jesús y seguirle (como sabe también la primera tentación de Mt 4 y Lc 4). Comprar a los hombres por “pan” por “dinero” podría ser algo diabólico; en el fondo del pan ha de estar la “palabra”, es decir, la comunicación entre los hombres y mujeres. 

3. El Discípulo amado sabe, además, que muchos buscaron a Jesús para hacerle “rey”, pues les prometía comida (2ª o 3ª tentación en Lc 4 y Mt 4), pero añade que Jesús rechazó de manera tajante esa interpretación egoísta de su evangelio, desde una perspectiva de poder, como ha hecho gran parte de la iglesia occidental moderna. . También en Lucas y Mateo Jesús rechaza el “reino político”, aunque lo hace con otros matices. Lo cierto es que Jesús no quiso competir con el Imperio de Roma, ni alzarse en armas contra los poderes imperiales, aunque hubiera tenido posibilidades de hacerlo. Este rechazo del “reino político-militar” define el proyecto de Jesús, y hace que muchos de sus seguidores “políticos” le abandonen. Éste es el fondo de su gran crisis de Galilea.

4. Ciertamente, el Discípulo Amado no niega le eucaristía de la Última Cena de los sinápticos y Pablo (1 Cor), pero la interpreta en forma de “comunión de carne y sangre, de comunicación personal de vida, de nueva y más alta experiencia de participación. Lo dice así y  La mayoría de los discípulos de Jesús se marcha… Pueden admirar a Jesús, con su camino de multiplicación… pero quieren otra cosa, otro pan, otro reino, ser reyes del mundo con Jesús. Quieren que el pan sea poder económico) y el Reino sea reino, político sobre el mundo.  Pero aquello que les ofrece Jesús les Jesús les parece sklêros, duro, una transformación personal que no están dispuestos a asumir…

Muchos se escandalizan con las palabras de Jesús — BIBLIOTECA EN LÍNEA  Watchtower

5. Aquellos galileos y nosotros, occidentales del siglo XXI no queremos ese lenguaje del Discípulo Amado, ni esa participación de la carne (es decir, de la vida entera). No es que rechacen a Jesús por “malo”, simplemente se van, quieren otra cosa. No dice, como muchos hoy, quizá engañándose a sí mismos “Jesús sí, iglesia no”. Ellos dicen simplemente “este Jesús no nos vale, ni es nuestra su iglesia de la carne y de la sangre entregada por los otros, hoy, año 2022, lo mismo que el año 30 o el 100 dc.C.

6. El gran fracaso galileo de Jesús, es Cafarnaúm, el evangelio de la carne y sangre de la vida. Todos se van, todos nos vamos… Uno a uno. Han venido buscando un tipo de pan y de poder, y al principio pensaron que Jesús respondía a sus deseos. Pero después, tras un largo sermón (Jn 6) han descubierto el sentido del Pan de Jesús, han comprendido el alcance de su Reino, y no quieren ni ese pan ni ese reino. Venían a por otra cosa, no la han encontrado, se van, cada uno a su pan, a su negocio, a su forma de entender el Reino. El Discípulo Amado, escribiendo hacia el año 100, a unos 70 años de distancia de los hechos, afirma que el proyecto galileo de Jesús ha terminado siendo un rotundo y total fracaso. No ha quedado nada. Quizzá hoy, año 2022, podríamos decir algo semejante: Se van muchos cristianos ¿Ha fracasado el proyecto cristiano-occidental del proyecto de Jesús, según la Iglesia católica?

Quedan los Doce… No se van. Pedro responde en nombre de todos (¡aunque hay un traidor escondido entre ellos!). ¿Dónde iremos? Tú tienes palabras de vida eterna. Da la impresión de que se quedan, pero son convencimiento… Han arriesgado mucho por Jesús, son la “estructura” de su movimiento. ¿Sería mejor que también ellos se hubieran ido, que Jesús comenzara con otros totalmente distintos? Jn 21 ofrece una primera respuesta a esas preguntas: Jesús no empieza con los Doce, sino con Siete… Jesús “examina” a Pedro en amor. ¿Qué significa esto para nosotros?

Jesús: el camino, la verdad y la vida — BIBLIOTECA EN LÍNEA Watchtower

  1. En el momento actual, en cualquiere de nuestras comunidades

He comenzado diciendo que esta historia (Jn 6) es una de las más actuales del evangelio. Es evidente que no podemos aplicarla hoy (2021) al pie de la letra, pues han pasado 20 siglos y las condiciones de la sociedad y de la iglesia son muy distintas. Tenemos una larga historia, de la que no podemos renegar, pero tampoco admitir totalmente y seguir como si nada hubiera pasado. Por eso es bueno leer de nuevo e interpretar el sentido de la crisis galilea de Jesús. Ésta sigue siendo una historia actual, y así quiero entenderla, siguiendo los ocho puntos de la exposición anterior: 

Detalles De La Configuración De Las Ruinas De La Antigua Sinagoga De  Cafarnaum En El Sitio Arqueológico Cafarnaum, Israel Fotos, Retratos,  Imágenes Y Fotografía De Archivo Libres De Derecho. Image 21649512.

  1. Hoy, año 2022, debemos aceptar el relato de la multiplicación de los panes… pero una multiplicación en gratuidada, al servicio de lo más pobres. Casi todo lo que hagamos dependerá de la forma de entender nuestro pasado. Hay un relato triunfalista, hecho de sacralizaciones de una historia muy rica, pero muy ambigua,, que hoy ya no se mantiene sin más… Hay otro relato derrotista: Todos se van, no queda nadie; conforme a ese relato, la iglesia ha sido una mentira que ya no sirve, no le queda palabra. ¿Cómo narrar de verdad lo que ha pasado y lo que somos? Sin una revisión de la historia de la iglesia, desde la crisis de Cafarnaúm, pierde su sentido el evangelio. 
  1. Todo este capítulo (Jn 6) ha sido un intento de reinterpretar la “comida”, esto es, la economía profunda de Jesús, la forma en que él nos ha enseñado a compartir el alimento, los bienes del mundo. Vivimos en un tiempo en el que solo parece que importa el “capital monetario”, los bienes que se pueden comprar y vender. Frente a eso estaba el proyecto de Jesús, que consistía en “compartir” ¿Sigue algo de eso en el fondo de la Iglesia? ¿El problema de la Iglesia actual es el mal uso del dinero?

 3.Muchos buscaron a Jesús para hacerle “rey”, pues prometía comida… El Jesús de Jn 6 rechazó ese tipo de reino, pero hay una iglesia que parece no haber seguido a ese Jesús… Muchos afirman que la Iglesia se ha mantenido como un sustituto del “reino político-social”, esto es, como un “imperio” dogmático-estructural. Parece que ese tiempo ha terminado o está terminado… ¿No se irán muchos cristianos de la Iglesia actual de Occidente porque ella no ofrezca ya Reino? ¿Qué tipo de reino? ¿Qué sentido tiene la oferta político-social de la iglesia en esta Iglesia-2021? ¿Qué queda en esta línea de una posible teología de la liberación?

ZINEMATEKA: Cafarnaúm > ficha de la película en golem

4.La disputa de Cafarnaúm (Jn 6) tuvo un fondo eucarístico… El tema resulta absolutamente crucial en nuestro tiempo. La eucaristía antigua ha perdido (está perdiendo) gran parte de su sentido. Muchos ministros católicos sólo saben “decir misas”; muchos “fieles” identifican el cristianismo con “oír misa” los domingos y fiestas de guardar. Muchos abandonan en masa el cumplimiento de la misa-dominical. En este discurso de pan de vida (Jn 6) Jesús instituye y promueve un tipo más alto de eucaristía, quizá sin necesidad de las estructuras sociales y sacrales de un tipo de iglesia actual. Muchos afirman que la Iglesia en su conjunto no ha entendido (ni siquiera ha leído) este discurso del pan de Jesús. Ha realizado algunas reformas cosméticas. Sin un cambio radical, la Iglesia del Discípulo Amado se acaba; en occidente le quedan dos o tres generaciones…

5.La mayoría de los discípulos galileos se marcharon, dejando a Jesús a solas en Cafarnaúm. El proceso se está repitiendo este año 2022, a pesar del Papa Francisco y de otros cristianos… El cambio que se requiere es duro, el evangelio decía sklêros… Es como si a los cristianos actuales nos costara el proyecto de Jesús: por eso lo hemos adornado, sacralizado, jerarquizado… Pero a costa de abandonar a Jesús. No quiero ser pesimista, pero me parece que la situación es peor de lo que suponemos y decimos. Conforme a la visión del Discípulo Amado, todo aquel proyecto de “reino galileo” de Jesús, con la propaganda que se le pueda “añadir terminó fracasando. A pesar de eso Jesús siguió, y siguió el Discípulo Amado (y Pedro, y la mayoría de los Doce). Muchos dicen que este proyecto del cristianismo occidental ha terminado, no tiene remedio. ¿Qué hacer? 

El cine de La 2': 'Cafarnaúm', de Nadine Labaki

6.El seguimiento de Jesús requiere una nueva experiencia de Dios… Lo que está en el fondo no es simplemente la Iglesia, ni siquiera Jesús… Está al fondo la experiencia de Dios. Muchos hemos creído en Jesús y hecho “hecho” una iglesia importante, pero sin que cambie nuestra visión de Dios, sin que Dios nos mueva, nos transforme, ilumine de un modo distinto nuestro ojos, recree nuestros corazones…. Nos hemos encerrado en ritos externos y leyes, en estructuras sacrales y mandamientos, en formas nuevas de mantener a los hombres sometidos, a través de una especie de “dictadura especial” propagada para ganar el cielo, no para transformar la tierra en cielo. Se dirá que hemos tenido 20 siglos, que hemos demostrado claramente nuestra incapacidad… 

7.Parece que estamos ante un fracaso occidental del cristianismo. Desde todo lo anterior, puede parecer lógico que todos se vayan. Jn 6 ha contado ese “fracaso galileo” de Jesús, pero no para no para retirarse, sino para empezar de un modo nuevo. ¿Y nosotros? Éste es nuestro desafío, nuestra tarea, en este tiempo que he definido como “etapa del fracaso occidental del cristianismo”. Ya sé que lo que digo puede parecer “retórica barata”; pueden decirme que estoy echando piedras contra mi propio tejado… Sinceramente creo que no es así. Vengo de una gran “derrota”, de una gran tristeza, como la del Discípulo amado contando en Jn 6 el fracaso galileo de Jesús, como de Pablo cuando cuenta en Romanos su inmenso dolor por la caída de gran parte de Israel (la incredulidad de los judíos). No es tiempo de remiendos, es etapa de nuevo evangelio.

 8.Pero quedan los Doce… y Pedro responde en nombre de ellos diciendo: ¿Dónde iremos? Tú tienes palabras de vida eterna. Éstas son las palabras que más esperanza me dan, las que más me duelen. A pesar del gran fracaso galileo Jesús pudo contar con los Doce (aunque uno le traicionaría, repite el texto).

Este Jesús de la crisis galilea cuenta con Pedro que le dice “dónde iremos…”. Esos Doce (once) de Cafarnaúm, convertidos en Siete, serán los iniciadores de la nueva escena de pesca, que comenzará precisamente aquí, en el entorno de Cafarnaúm, en Galilea  (Jn 21).

  Así comienza nuevamente la historia cristiana, según el Discípulo amado. Eran siete, simplemente siete con  Magdalena y la Madre de Jesús). Y empezaron de nuevo.

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