Los religiosos españoles entonan el mea culpa en la primera cumbre antiabusos de la Iglesia española "Durante muchos años ignoramos a las víctimas, no las creíamos. La Iglesia no tiene futuro sin ellas"

"Las víctimas necesitamos conocer la verdad" reclama Juan Carlos, en nombre de los abusados
"A la víctima le será muy difícil sanar si seguimos protegiendo al abusador", subrayan los expertos
“Las víctimas necesitamos la verdad. La Iglesia no sabe qué hacer con el dolor de las víctimas, la sociedad tampoco. La herida sangra y cualquier detalle nos duele. Es el momento de limpiar la iglesia, así que no nos habléis de la casa de los otros cuando ésta está sucia”. Juan Carlos González, víctima de abusos, puso el dedo en la llaga, durante la primera 'cumbre antiabusos' organizada por la Conferencia Española de Religiosos, con la colaboración de Escuelas Católicas y la participación del secretario general de la Conferencia Episcopal, Luis Argüello.
El encuentro, celebrado a puerta cerrada en el Centro Pastoral Jesuita de Maldonado, en Madrid, sirvió para que los religiosos se encontraran cara a cara con el dolor de las víctimas, y con el silencio y el ocultamiento que, durante décadas, han protagonizado la actitud de la Iglesia española ante la pederastia.
"No somos presuntas víctimas"
Delante de los líderes de la práctica totalidad de las congregaciones religiosas españolas, Juan Carlos exigió “poner a disposición de las autoridades a los agresores”, aunque “no es suficiente. Es imposible que nada nos resarza plenamente”. “Nos duele que se nos catalogue como presuntas víctimas, no somos presuntos”, recordó ante varias decenas de responsables de congregaciones e institutos religiosos.
Da comienzo a la Jornada conjunta sobre Abusos de poder, conciencia y sexuales, organizada por @MediosConfer@ecatolicas y @Confepiscopal , con el saludo de D. Luis Argüello, Dña. Mariña Ríos y D. José María Alvira pic.twitter.com/ipSrnFBYzg
— luis centeno (@lcentenoc) 29 de mayo de 2019
Las palabras de Juan Carlos sirvieron de pórtico para una jornada dura, pero necesaria, que servirá para que, de una vez por todas, los responsables eclesiásticos se comprometan en una auténtica tolerancia cero frente a los abusos y al encubrimiento. En la apertura, la presidenta de Confer, Mariña Ríos, invitó a todos a “poner los medios necesarios para afrontar las situaciones que se han dado, para garantizar y trabajar juntos”.
Por su parte, el secretario general de Escuelas Católicas, José María Alvira, indicó que “el objetivo de la Iglesia es escuchar, tutelar, proteger y cuidar a los menores abusados allá donde se encuentren. La Iglesia tiene que estar por encima de las polémicas. Ha llegado la hora de colaborar juntos”.
Todos nos sentimos responsables
A lo largo de la mañana se han producido dos mesas de experiencias. En la primera, Covadonga Orejas, secretaria general de la Asociación Betania, que acompaña a las víctimas de abuso, y Juan Carlos Pérez Godoy, presidente de Escuelas Católicas, que coincidieron en asegurar que “no queremos que el tiempo se convierta en una excusa para no afrontar algo de lo que todos nos sentimos responsables”.

“La resolución que podamos dar a las víctimas es el compromiso por una conversión personal y colectiva y la humildad de aprender, escuchar y asistir a los más vulnerables.
"Quisiéramos poder pedir perdón una a una, a cada víctima. Mirándolas a los ojos. Reiteramos nuestra firme disposición para reparar el mal causado"
, destacó Godoy.
Pena, vergüenza e indignación
Por su parte, Luis Alfonso Zamorano, experto en el trato con víctimas, mostró su “pena, vergüenza, compasión e indignación” por la actitud de la Iglesia. “A la víctima le será muy difícil sanar si seguimos protegiendo al abusador. No hay sanación posible mientras la persona acusada siga campando a sus anchas, o con castigos que mucha gente ni entiende”.
Por su parte, Aaron Smith y Amalia Casado, responsables de comunicación del Regnum Christi, hablaron de su experiencia a la hora de abordar los abusos de su fundador, Marcial Maciel:
“Hemos hecho sufrir a la iglesia y a la sociedad. No hemos sabido cómo tratar a las víctimas. Tiene que producirse un cambio de mentalidad”
, señalaron.
“Durante muchos años ignoramos a las víctimas, no las creíamos”, lamentaron, admitiendo que “las víctimas son parte de nosotros. No podemos desprendernos de ellas como si fueran prescindibles. No hay futuro para la institución sin ellas, y no hay memoria de la institución, sin su memoria”.
Finalmente, el portavoz episcopal, Luis Argüello, hizo un llamamiento a toda la Iglesia “para que caminemos juntos. Camino de prevención, con las víctimas, formativos. Hay que poner sobre la mesa lo mucho que ya hay y desde ahí aprender juntos y ayudarnos unos a otros”.
‘La realidad de los abusos, como miembros de la Iglesia nos llena de tristeza y vergüenza, ojalá nos llene también de compasión’ J.Mª Alvira, secretario Gral. @ecatolicas. Comienza la ‘Jornada sobre abusos de poder, de conciencia y sexuales’ con participación de @Dominican_Orderpic.twitter.com/r1jeVk1Gcz
— Dominicos (@dominicos_es) 29 de mayo de 2019