Las finanzas del Vaticano
Poderoso caballero es don Dinero, decía el Quijote y el nuevo Papa, que será elegido el próximo cónclave tendrá, por muy espiritual que sea, dedicar tiempo a las finanzas del Vaticano o encargarlas a gente de su confianza. Años de mala administración y desinterés han producido la situación actual, un déficit anual de 83 millones de euros que no es una cantidad menor
El Papa Francisco creó una brigada anticorrupción en el 2019 que destapó la compra de un edificio en Londres que le costó al Vaticano muchos millones. El Istituto per le Opere, IOR, es el nombre del banco vaticano, fundado en 1942 por Pío XII con la intención de administrar las finanzas vaticanas. Desde entonces han saltado muchos escándalos con la acusación de tener relación con la Mafia y el crimen organizado, la sospecha de haber blanqueado oro de los nazis y la muerte misteriosa del banquero Roberto Calvi. El Papa consiguió acabar con todo esto, de forma que el Consejo de Europa que había alertado de la posibilidad de colocar a la institución en la lista negra, no lo hiciera
Francisco intentó terminar también con el status quo, con la oposición de muchos burócratas de la curia que se beneficiaban de la situación, pero la resistencia de la resistencia fue mayor como confesaba Jean Baptiste de Franssu, el presidente del banco vaticano actual en una entrevista al Financial Times. El papado anterior consiguió poner orden en el banco vaticano y en Apsa que ahora presentan buen estado de salud
El banco vaticano es donde tienen las diócesis, las órdenes religiosas, los empleados, sacerdotes y las organizaciones caritativas su dinero. Manejan 5,5 billones y tuvieron un beneficio en 2023 de 30 millones. Otro pilar de las finanzas es el patrimonio de la sede apostólica, Apsa, un fondo soberano que administran. Por otro lado, tienen la carga de un fondo de pensiones para los empleados que sube cada año
El mayor y más conocido escándalo sucedido en 1982 fue el colapso del banco Ambrosiano en donde el banco vaticano tenía mucho dinero invertido, 250 millones de euros. En esa época las finanzas vaticanas las llevaba el arzobispo Paul Marcinkus, cuyos conocimientos financieros provenían de un curso acelerado de seis semanas en la universidad de Harvard. Su nombre apareció ligado con operaciones ilícitas de la mafia y con Roberto Calvi que era el jefe del banco. Con el tiempo se supo que Calvi había lavado dinero de transferencias a políticos italianos y a la compra de armas. El cuerpo de Cali apareció colgado de un puente en Londres, la apariencia inicial fue de un suicidio, pero la investigación posterior lo convirtió en un asesinato, aunque nunca se supo quién lo promovió
Las aguas no se mostraron tranquilas cuando el auditor Libero Miloni pidió en 2017 información de los millones de euros que aparecían ligados a instituciones vaticanas en Suiza. Restaurar la confianza en la hacienda vaticana no está siendo fácil e influye en el declive de las donaciones, año tras año. Entre 2015 y 2019 disminuyeron un 23% ya que los donantes quieren saber el uso de sus dineros y… siguen bajando
El anterior papado hizo muchos progresos. Cuando Francisco llegó sólo había un banco que quería trabajar con el Vaticano, porque no se fiaba, y hoy son 45. Trató de mejorar las cuentas recortando pagos a cardenales y vendiendo propiedades, pero el déficit anual en el 2023 fue de 83 millones y las pensiones suben todos los años
El artículo del Financial Times donde he sacado estos datos termina alabando a Francisco que venció el mantra vaticano “así se ha hecho siempre”, un camino oscuro y temerario que conduce a la ruina. Al nuevo Papa le caerán todos estos problemas y aunque lo parezca no son menores, porque poderoso caballero es don Dinero