El Presidente Obama hizo su primer viaje a Europa esta semana, comenzando el día 4 de marzo en Londres. El motivo principal era acudir a la cumbre del G-20 en Londres donde líderes de 20 países del mundo trataron de encontrar soluciones para la crisis económica global. Mientras, cientos de cristianos se reunieron en las calles de la ciudad de Londres para pedir a Dios que guíe a los responsables políticos de los países más poderosos del mundo en sus conversaciones y decisiones.
No sólo en Londres, sino que alrededor del mundo entero el tiempo avanza… y flota la pregunta ¿cómo resolver la crisis finaciera global? Los países representados en la cumbre del G-20 constituyen más del 85 por ciento de la economía mundial.
Aunque hubo sonrisas para las cámaras, tras las bambalinas fue otra historia. El Presidente Obama quiso instar a los líderes europeos a invertir más fondos en sus propias economías para aliviar la recesión global. Pero estos le respondieron: “no tan rápido señor presidente.” La canciller alemana Ángela Merkel dijo que nadie le va a decir cuanto dinero debe gastar. Otros líderes europeos piensan lo mismo.
Puede leer aquí la noticia completa titulada Cientos de evangélicos oraron en el Big-Ben durante la reunión del G20 en Londres en Protestante Digital.