La marcha de Santiago Oriol, mazazo a la Legión de Cristo

Un duro golpe para la Legión. Sobre todo, por lo que los Oriol representan dentro y fuera de la organización. Un golpe más duro todavía proque, según lo poco que ha trascendido, la marcha de Santiago Oriol se debería, fundamentalmente, a la permanencia en sus cargos de los líderes de la Legión de Cristo, sobre todo Alvaro Corcuera y, especialmente, Luis Garza.
Con su marcha, Santiago Oriol viene a decir que son muchos los Legionarios que no se tragan el cuento de que Corcuera y Garza no supiesen nada y no fuesen cómplices de las fechorías del depravado Marcial Maciel. Son muchos los Legionarios auténticos y convencidos que se sienten engañados. Primero, por el fundador y, después, por sus máximos dirigentes.
Y son muchos los que no se contentan con paños calientes. Vengan de la cúpula de la Legión o del mismísimo comisario, el electo cardenal Velasio De Paolis. Quieren pasar página, pero de verdad. Quieren limpiar, purificar y sanear a fondo su congregación. Porque saben que sólo podrá seguir teniendo futuro, si reniega de su pasado, de su fundador y de sus raíces. Una refundación en toda regla, para que, en el futuro, nadie pueda avergonzarlos y desacreditarlos, mentando a Maciel.
Es de alabar la valiente postura de Santiago Oriol y su paso al frente. Todo un aldabonazo, que alguien en Roma debería escuchar.
José Manuel Vidal