¿¡En nombre de Dios!? ¡¡¡Cuidado!!!
Crítica Constructiva
| José María Lorenzo Amelibia
¿¡En nombre de Dios!? ¡¡¡Cuidado!!!
Cuánto se ha abusado y ojalá no se vuelva a abusar de esta exclamación. La última vez que la escuché fue en boca del depuesto presidente de Honduras, Zelaya, cuando les pedía en nombre de Dios que le volvieran a admitir. Me sonaba por lo menos a irreverente. Es muy distinto pedir por amor a Dios, que exigir algo en nombre de Dios. ¿Quién puede pedir algo en su nombre? Pienso que sólo se puede pedir en su nombre lo que Él nos ha dicho: “Cualquier cosa que pidáis al Padre en mi nombre, se os concederá”. En nombre de Dios tal vez podamos también pedir que se cumpla su voluntad, sus mandamientos, pero con mucho cuidado, porque con facilidad tendemos a identificar nuestra propia voluntad con la de Dios.
Un amigo recibió una sentencia condenatoria de un dicasterio romano. El rescripto comenzaba con la sentencia que al parecer entre ellos es algo rutinario: “In nomine Domini” = “En el nombre del Señor”. Se le revolvían sus entrañas religiosas al verse injustamente tratado, y que encima pusieran la remembranza de “en el nombre del Señor”. Y no ha sido caso único. Otro compañero llegó a perder la fe, al menos en la Institución Eclesial, por algo parecido. Y solía repetir: parece mentira… parece mentira… que actúen así en “Nombre de Dios”.
Son expresiones que conviene considerarlas mucho, usarlas poco, respetarlas al máximo, nunca utilizarlas más que en caso necesario y cuando con evidencia aparezca que aquello, de verdad, es en nombre de Dios. Mientras tanto cuando hayamos de pedir, suplicar, rogar o exigir, hagámoslo por amor de Dios.
Creo – y si me equivoco que me corrijan – que ni siquiera el Papa debiera usar esta frase más que en ocasiones muy extraordinarias, como en las contadísimas circunstancias históricas en que habla ex cathedra, o cuando textualmente cite alguna frase del mismo Jesús, como la señalada anteriormente.
Si hacemos daño a alguien, no le exasperemos diciéndole encima que es “en nombre de Dios”; suena a blasfemo.
José María Lorenzo Amelibia Si quieres escribirme hazlo a: josemarilorenzo092@gmail.com Mi blog: https://www.religiondigital.org/secularizados-_mistica_y_obispos/ Puedes solicitar mi amistad en Facebook https://www.facebook.com/josemari.lorenzoamelibia.3 Mi cuenta en Twitter: @JosemariLorenz2