#navidad2023 ¡ALÉGRATE!... Pues, aun así, es NAVIDAD
| Luz Mery Bermeo de los Ríos
Hay algo en nosotros que nos invita a la alegría por estos días de Navidad, sin embargo, he percibido una tendencia a compartir el dolor de los que sufren y así lo reflejan los mensajes recibidos:
- El niño Dios está llorando en el pesebre, por los niños asesinados en Gaza, y los ángeles no han podido acercarse porque los bombardeos no dejan ver el cielo. Bienaventurados los que trabajan por la paz, porque ellos serán llamados hijos de Dios (Mt 5,9) P. Agustín.
- “Hnita yo le agradezco la imagen de este niñito, es para mí un aliciente, muchos viven navidades muy amargas... y Él es quien alienta y recupera” Sandra.
- Maxi Larghi, en su canción tengo sed, nos habla de un pesebre de cartón y trapos…
- “Tu Natividad contemplamos, adoramos y cantamos reconociendo tu infante rostro humano, nacido en el polvo de nuestro portal de injusticias y dolor que restauras y haces vida con Tu Divina sonrisa y Tu magnánima ternura mi bello infante.” Agnes
- Giselle, en Mujeres Voces Proféticas, nos comparte un video con la canción del Tamborilero adaptada y dice así: El camino que lleva a Belén, baja hasta el valle que el sionismo ocupó los palestinos ya no pueden volver, hoy solo hay ruinas, muerte y desolación… Ropo pon pon…
Una forma nueva de desearnos la Feliz Navidad y esto es bonito, esto también es Navidad, pues, sabemos que la vida no es como la quisiéramos y aun cuando los deseos de nuestro corazón sean los mejores… a Dios le ha parecido bien, que las cosas se den de otra forma.
En rezando voy nos dice la reflexión que: “no era así como José y María se imaginaron que se cumpliría la promesa de Dios” esto me remite inmediatamente a las tiernas incomodidades con que nació. Y es verdad, no era así como esperábamos la Navidad, muchos aguardamos pacientemente la llegada de Jesús, Emanuel, Dios con nosotros y confío en su capacidad para sorprendernos, como leemos en el evangelio Nada es imposible para Dios. Lc 1,37
Sé que no podemos ser indiferentes al dolor y me imagino a este dulce Dios con nosotros en medio de bombardeos, desplazamientos, llanto, soledad, enfermedad, distancia, en el deseo de un empleo, de un esposo o esposa fiel, unos hijos cercanos, una familia unidad, una sociedad más fraterna y justa… así es Navidad por esta tierra y Dios descolocándonos…
Ruhama, escribe sobre la hermenéutica profética del artesano que, con gran osadía, introduce en el pesebre un personaje con un cerdo, para presentarlo a Jesús y lo concluye así: “Con cerdo o con estridente tambor, Jesús Nazareno nos sonríe y nos acepta con los brazos abiertos con todo y nuestro bagaje y carga cultural, religiosa, imaginaria, política y racial...”
Y solo puedo decir ¡ALEGRATE!... Pues, aun así, es NAVIDAD