La historia de un capellán castrense en el Amazonas peruano Ignacio Doroño: "Estoy profundamente enamorado de Dios y Él me pedía dejarlo todo, y compartir la suerte de los pobres"

(Antonio Mancera Cárdenas, en Benemérita al dia).- La historia del sacerdote bilbaíno Ignacio María Doñoro comenzó en 1989 con su vocación sacerdotal en parroquias de Cuenca. "Yo era un chico normal que se dedicaba al judo. Jamás pensé en ser sacerdote, quería ser abogado para ayudar a las victimas del terrorismo, pero un día sentí a Dios tan cerca de mí que supe que tenía que serlo", explica. Ocho años más tarde viajó de misiones hasta Bosnia o Kosovo y luego decidió unirse a las Fuerzas Armadas como capellán militar en 2001.

Sin embargo, nada más llegar al Ejército pidió dar servicio a la Guardia Civil. Este colectivo estaba siendo aniquilado por la banda terrorista ETA. Hoy su vida está dedicada a luchar por los mas vulnerables, los mas necesitados, los niños, fundando para ellos y en plena selva amazónica "Hogar Nazaret".

En primer lugar y para que nuestros compañeros si no lo conocen lo hagan ¿Qué es el Hogar Nazaret?

La palabra compañero me sigue produciendo un cosquilleo en el alma, he sido tan feliz en la Guardia Civil... Han sido los mejores años de mi vida.

El Hogar Nazaret es una obra de Dios, una obra de misericordia de la Iglesia, que intenta restituir a los niños más pobres de entre los pobres, los derechos que les han sido vulnerados: derecho a la identidad, a la salud, a la familia, derecho a sentirse especiales y ser amados.

He tenido muchas dificultades, "Dios nunca lo pone fácil", tuve que salir de Puerto Maldonado. Después de la paliza en la que me dieron por muerto, y comprobar que no habían conseguido su objetivo, intentaron tres veces más atacarme, gracias a Dios todo aquello fue para bien.

"No querían caldo, pues habrá tres tazas", en unos meses tendremos tres hogares dentro de la Prelatura de Moyobamba en el Valle del Alto Mayo, selva del Amazonas.

De alguna forma Hogar Nazaret está vinculada a unos niños muy importantes a los que usted atendió junto a sus familiares en momentos muy difíciles.

Dios se sirvió para que en medio de tanta soledad, incomprensión, impotencia, creásemos Anaitasun Eusko Elkartea y nos presentásemos a los ayuntamientos guipuzcoanos pidiendo subvenciones con el fin de crear hogares para los niños de San Salvador.

Esto nos obligaba a visitar viudas, reunirnos a cenar, salir a respirar otros aires...Y de paso, salvar vidas, dando a ese dinero, un noble destino.

Qué tiempos, cuántas experiencias... Cuando veía al otro retorcerse en la soledad y ponía sobre la mesa la tragedia de los niños salvadoreños, nos olvidábamos unos momentos por lo que estábamos pasando.

Usted a pesar de ser vasco o precisamente por serlo, quiso estar junto a los que en los peores años del terror de ETA más sufrían la sinrazón de los terroristas.

Así es, y precisamente por ser vasco, y como decía Unamuno, dos veces español: una por nacimiento y otra porque desde la niñez cada día tenía que defender mi Patria. Español de nacimiento, de educación, de cuerpo, de espíritu, de lengua y hasta de profesión y oficio.

Un día asistí a un funeral en la Basílica de la Virgen de Begoña en Bilbao. Habían asesinado a un guardia civil, mi padre vestía corbata negra, yo tendría unos ocho años.

Con la ingenuidad de niño, pregunté quién era aquel hombre por el que mi padre lloraba.

La respuesta fue contundente: hijo, este hombre era de nuestra familia.

Pero papá, ¿es mi tío? No hijo, mucho más, es un guardia civil, gracias a él y a hombres como él, estamos vivos.

Celebré la primera Misa en Bilbao, el día de la Virgen del Pilar, con el compromiso, de ofrecer todas las misas de mi vida por España. Así lo hago cada día, ahora un poco lejos, en la Amazonía peruana.

Qué supuso su estancia en Inchaurrondo.

Desde siempre les admiraba y fue una gracia que Dios me concedió. Aquellos hombres y mujeres lo daban todo por defender nuestra tierra, nuestras vidas. Alimentar el alma de los mejores de España, era un sueño hecho realidad.

Qué opina de quienes hoy pretenden que la Guardia Civil abandone definitivamente el País Vasco y Navarra, o de quienes pretenden su desaparición.

La ignorancia es tan atrevida... Esos hombres a los que rechazan, están dispuestos a dar, defenderles si sus libertades son vulneradas o incluso arriesgarán sus vidas si están en una situación de peligro.

La guardia civil no tiene tiempo para la política. Es militar en cuanto a su disciplina, honor, espíritu de sacrificio, abnegación, integridad, profesionalidad, lealtad y compañerismo.

El principio de cumplimiento del deber de un guardia civil limita la propia voluntad como una necesidad moral; moral que debe ser interiorizada como propia. Subordina el bienestar propio por el de los demás.

Volviendo a Hogar Nazaret, dice que es obra de Dios, pero sabemos que sin usted no hubiese sido posible este proyecto.

"Dios ha elegido lo necio del mundo para confundir a los sabios" (1Cor 1,27)

¡Me costó tanto dejar a los míos! Era tan feliz que solía decir que el purgatorio sería muy grande...

Estar enamorado es mi cruz y mi gloria. Estoy profundamente enamorado de Dios y Él me pedía dejarlo todo, y compartir la suerte de los pobres.

"No toméis nada para el camino, ni bordón, ni alforja, ni pan, ni dinero; ni tengáis dos túnicas cada uno".(Lc 9,3) Y vine sin nada, solo con mi Virgen del Pilar.

He hecho lo que he podido estos años. Ahora el proyecto va tomando forma.

Dios lo quiere, han sido muchas las trabas, pero lo que Dios pide se hace.

En sus casas, lo primero que se ve es la imagen de la Virgen del Pilar, que supone para Hogar Nazaret y el porqué de la presencia de nuestra Patrona en Hogar Nazaret.

Así es, cuando llegas al Hogar Nazaret, la Virgen del Pilar es lo primero que ves. La imagen tiene su historia.

Estando destinado en Inchaurrondo, San Sebastián, preparaba el primer viaje a Colombia.

Propuse a los niños que vivían con sus familias en el acuartelamiento, regalar algo para los niños colombianos. Entregaron treinta y cinco equipaciones completas del Real Madrid y una del Barcelona. Algunas madres advirtieron que las prendas eran de la marca auténtica y costosa, pero se sentían orgullosas del gesto de sus hijos.

Los chiquillos se confabularon y decidieron que si ellos habían hecho ese esfuerzo, yo tenía que donar lo más preciado, la imagen de la Virgen del Pilar que recién ordenado sacerdote me habían regalado. Dudé, pero los niños tenían razón... Si ellos habían entregado lo mejor, yo debía hacer lo mismo.

En una emotiva Misa, la imagen la bendijo Mons. Francisco Pérez González, entonces arzobispo castrense. Estuvo un tiempo en la capilla del cuartel y partió para la casa de niños abandonados en Bogotá custodiada por los guardias civiles.

Los guardias y los españoles destinados en la embajada española en Colombia prepararon un buen recibimiento. Teníais que ver a los niños colombianos cantando el himno del Cuerpo.

Ofrendas de flores, cantos... Acudía con frecuencia a la casa de los niños a visitarla...

Pasados los años fue a parar a un trastero. Los guardias civiles ofendidos por el trato dado a su Patrona, la trajeron de regreso a España.

Buscamos iglesias donde donar la imagen, pero cuando decidíamos entregarla en una parroquia, no podían ponerla al culto, ya tenían la misma advocación.

Cuando Dios abrió los caminos para fundar el Hogar en la selva del Amazonas, sentía que en este recorrido de casi veinte años Ella me trajo aquí.

Fue la primera en entrar en la casa. Por fin regresaba a su Hogar Nazaret, que ya no estaba en Palestina sino en Puerto Maldonado. Ahí comprendí las idas y venidas. Cómo nuestra Madre se las ingenia para estar donde desea y cuidar de sus hijos más pequeños. Cuando un niño llega al Hogar, es el Niño Jesús el que abraza a su madre.

La Virgen María nos recuerda que hay que dar, no de lo que nos sobra, sino lo que más valoras. No se trata de cuánto damos sino de cuanto amor ponemos al dar.

¿Cómo viven los niños en el Hogar Nazaret?

Por encima de las circunstancias adversas vividas, su verdadera familia no es la que les viene dada por su nacimiento, sino la que ellos, libremente, eligen.

El Hogar Nazaret es una familia sobrenatural nacida del sueño de Dios, que reclama hombres y mujeres nuevos, pero verdadera familia para siempre.

Son aceptados tal y como son, no se sienten juzgados. Cada niño es irrepetible, imprescindible, único. Aprenden habilidades de comunicación y relación.

No se les educa para que sean felices en un futuro, sino para que sean felices hoy. Los éxitos y la felicidad del otro, es la de todos.

No es tan solo un lugar donde crecen, es el pilar imprescindible para su entorno emocional, donde se forjará su personalidad, equilibrio interior y dominio de la voluntad.

Conocen a Dios como el Padre amoroso que los quiere con locura, escucha siempre, y pueden hablar. El mejor amigo en quien pueden confiar...El Señor hace, ellos se dejan hacer.

Cuando entra un niño nuevo se sorprenden por la acogida, generosidad, buen humor y actitud de servicio. Ya es un hermano más que debe afrontar retos, en los que no le permiten auto-compadecerse y ayudan a perdonar y perdonarse.

Según su edad asumen responsabilidades. Se tienen muy en cuenta sus opiniones, aspiraciones, deseos. Les pedimos sin miedo que tomen decisiones y asuman las consecuencias. Se saca más provecho de los errores que de los aciertos.

Para el Hogar Nazaret los niños no son el futuro, sino el presente lleno de futuro.

¿Cómo se subvenciona Hogar Nazaret? ¿Recibe ayudas de las autoridades?

Pues la pregunta me hace sonreír: soy el responsable y no sabría contestar. No hay ninguna ONG detrás que nos respalde, no hay ninguna subvención estatal, la iglesia local es tan pobre que tampoco puede apoyarnos.

¿Cómo nos sostenemos? Como hacían nuestras madres con los bajísimos sueldos de sus maridos guardias civiles. Con la cabeza muy alta, pero pasando penurias... Jamás la Providencia nos ha dejado. Siempre ha habido compañeros que con esfuerzo han ayudado al Hogar Nazaret.

Solo los que saben lo que es pasar necesidad comprenden esto.

Qué le diría a quien nos lee sobre Hogar Nazaret.

Hay que seguir, es una obra benemérita, es nuestra obra.

Se lo debemos a nuestros compañeros caídos. Quizás quieran callarnos o incluso culpabilizarnos pero saben bien que si callamos, gritarán las piedras.

En el altar del Hogar Nazaret están las reliquias de los santos mártires, aquellos que locos de amor por Dios y con la esperanza de una España mejor, generosamente ofrendaron sus vidas.

Jamás se ha oído que un guardia civil abandone a un compañero en el combate, desde esa convicción, os pido que me ayudéis a sacar adelante a estos niños que son los últimos de la tierra.

Solo hay tres casas para niños en situaciones extremas, esas por las que sin titubear darías tu vida...Con tu ayuda seguiremos adelante.

Muchas gracias Páter por sus palabras, y gracias por sus años junto a los compañeros y a sus familias que necesitaban ser reconfortados en los momentos mas duros, pero sobre todo gracias por luchar por los mas necesitados del mundo, los niños.

Para los que no conoceis la obra del Páter Ignario María Doñoro, podeis visitar su página.

Y si quereis ayudar a quien siempre se ha considerado y ha sido un compañero para nosotros, para quien siempre ha estado a nuestro lado en los momentos más dificiles, podéis hacerlo a través de la cuenta:

BIC o SWIFT: CAIXESBBXXX

IBAN: ES32 2100 5450 6102 0009 4211

Y si quieres saber las necesidades reales de los niños de Hogar Nazaret y lo que poco a poco con vuestra ayuda ya han conseguido, podeis visitar esta página.

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