Alégrate, Reina del cielo

Regina coeli, Cernohorsky

¡Feliz sábado! Junto con el gozo y la alegría de la Virgen, vamos a alegrarnos también nosotros porque Cristo ha resucitado, y ese es el fundamento de nuestra fe. Dentro de las antífonas marianas, esta de hoy es la que toca en el tiempo de Pascua y por eso, quiero traértela en este sábado de la octava, semana muy importante para la Iglesia. La obra de hoy es de un desconocido compositor que, sin embargo, nos ha visitado en otras ocasiones.

Bohuslav Cernohorsky

Se trata de Bohuslav Matěj Černohorský (1684-1742), compositor checo nacido en Nymburk. Su familia tenía una gran tradición musical en Bohemia y Praga. Estudió Filosofía en Praga y, mientras que se formó con los jesuitas terminó haciéndose franciscano. Marchó a Italia y allí permaneció durante más de una década. Compuso unas letanías para conmemorar la victoria católica en la Montaña Blanca. Su país natal intentó que volviese, concediéndole incluso algunos beneficios; era tenido por un extraordinario organista y profesor. Sin embargo fue condenado al ostracismo y pidió permiso para volver a Italia. Allí estuvo hasta 1741, cuando regresó. No pudo, de todas formas, llevar una vida demasiado cómoda en Bohemia, donde no encontraba su sitio. Dijo: «Aquí hay un pecho abierto sin corazón pero, ¿has visto alguna vez un pecho abierto, sin corazón, y que continúe viviendo?».

De este maestro vamos a disfrutar de su Regina coeli. Está compuesta para dos coros de cuatro voces y está considerada como una de las obras más antiguas suyas. Se dice que incluso pudo ser compuesta para presentarse a una plaza en Asís. Černohorský imprime a la obra de todo el carácter pascual, destacando el inicio. Cuando se le pide a la Virgen que ruegue por nosotros se calma la obra y adquiere un tono más implorante, que pronto se rompe para hacer un da capo y volver a esa alegría inicial que tanto gozo nos ha producido. Una composición que se nos pasa en un suspiro.

La interpretación es de Hipocondria Ensemble y Societas Incognitorum dirigidos por Eduard Tomastik.

Volver arriba