Bach, sonata BWV 966

Bach, sonata BWV 966

¡Feliz domingo! Nuestro recorrido por el catálogo BWV sigue de forma imparable, da igual que termine el año o que comience. La grandeza de Bach es que siempre nos maravilla sea cuando sea porque compuso una música atemporal, que lo trasciende todo. Hoy vamos a seguir por esas obras en las homenajea a otro gran maestro.

J. S. Bach

Recorramos la biografía de Johann Sebastian Bach (1685-1750), compositor alemán nacido en Eisenach y fallecido el Leipzig. Creo que ya he comentado que el 2 de marzo de 1714 Bach promocionó a concertmaster en Weimar. Se da la circunstancia que, ese año, el 25 de marzo era tanto el día de la Anunciación como el Domingo de Ramos. Ello hizo que, para ese día, compusiese su cantata BWV 182, Himmelskönig, sei willkommen, en la que se alaba a Jesús como Hijo de Dios, que entra triunfalmente en Jerusalén. La orquestación era muy llamativa y, desde el movimiento inicial, el nuevo concertmaster dejó claro que iba a estar muy presente en la vida musical de la ciudad. Fue interpretada en el Himmelsburg, es decir, el «castillo del cielo», que era la capilla de palacio.

Escuchemos su Sonata en do mayor, BWV 966. De nuevo estamos ante una adaptación para teclado de parte de una composición de Reincken. Sin embargo, la obra sí está completa porque Bach decidió no hacer la transcripción del original entero. Destaca la fuga, que se asemeja a un concierto veneciano, con un pulso a base de decimosextas, interrumpidas por un contrapunto algo arcaico. A pesar de ello, Bach se nos muestra como un gran dominador de ese estilo veneciano de forma que, en sus manos, parece algo nuevo. Las partes de la obra son: Praeludium - Fuga - Adagio - Allegro - Allemande.

La partitura de la composición se puede conseguir aquí.

La interpretación es de Ramin Bahrami al piano.

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