¡Feliz lunes y día de la Epifanía y feliz semana! Hoy es el último día de estas frenéticas fiestas navideñas (aunque el tiempo litúrgico de Navidad termina el domingo 12) pero es una fiesta muy importancia. Desgraciadamente se ha impuesto que es la fiesta de los reyes magos pero en realidad es la de la Epifanía, es decir, el día en el que Dios, en forma de niño, se manifestó a toda la Tierra, representada por esos reyes que dice la tradición que vinieron de oriente.

Hoy nos trae la música Peter Cornelius (1824-1874), compositor alemán nacido en Mainz. Sus padres eran actores y su padre recibió también lecciones de música, gusto por la cual transmitió a su hijo. Este, con solo doce años, ya comenzó a componer. Se terminó dedicando definitivamente a la música y se marchó a Berlín. Liszt conoció sus canciones y le animó a seguir componiendo. De hecho, el húngaro estrenó su primera ópera, que fue uno de los mayores escándalos del siglo XIX (contra Liszt no contra Cornelius). En Múnich fue contratado por Wagner para encargarse de los ensayos per tuvo que dejarlo por desavenencias entre ambos. Entre sus contemporáneos era un maestro muy respetado y encantador. Su música era muy admirada, sobre todo sus óperas, aunque sus primeras composiciones de cámara aún muestran un talento inmaduro. Sin duda es un compositor marginal pero que merece la pena ser conocido.

Escuchemos su villancico Die Könige, op. 8 n.º 3. Es una canción para voz y piano pero que se ha popularizado en su versión para coro. Él mismo, que tenía un gran talento para la poesía, escribió el texto, que nos cuenta cómo el niño Jesús veía la visita de los reyes magos. La obra está llena de encanto y religiosidad pero Cornelius no debió quedar demasiado contento porque revisó la obra por consejo de Liszt. Este le sugirió que incluyese en el bajo el coral Wie schön leuchtet der Morgenstern, con lo que aún le añade un carácter más religioso y luterano. En la versión coral, que es la que escucharemos y data de 1840, la voz solista canta el poema de Cornelius y el coro la acompaña con la armonización de ese coral.

La partitura de la obra puedes descargarla aquí.

La interpretación es del Coro del King's College de Cambridge dirigido por Stephen Cleoubury.