La presidenta brasileña, Dilma Rousseff, lamentó hoy en un comunicado la muerte del obispo brasileño Tomás Balduíno, a quien consideró como "un incansable luchador de las causas populares".
"Figura destacada en la oposición al régimen militar, don Tomás fue defensor intransigente de los derechos de los indios, de los trabajadores sin tierra y de los más pobres", comentó la presidenta.
La Comisión Pastoral de la Tierra (CPT), de la que Balduíno fue fundador, informó hoy de la muerte del obispo emérito de Goiás Velho, quien falleció el viernes a los 91 años de edad como consecuencia de una trombo embolia pulmonar en el Hospital Neurológico de Goiania.
Defensor incansable de la reforma agraria, abogó durante su vida por la justicia social y por la causa de los más oprimidos, especialmente por los campesinos y comunidades indígenas.
"En nombre del Gobierno brasileño, rindo, en esta hora de dolor, mi homenaje a la vida de don Tomás", añadió la jefe de Estado.
El cuerpo sin vida de Balduíno será velado en la Iglesia Sao Judas Tadeu, en la capital goiana, hasta las 10.00 hora local (13.00 GMT) del domingo, cuando será celebrada una misa en su honor.
Posteriormente, será trasladado a la catedral de Goiás Velho, donde permanecerá hasta el lunes, fecha en la que está previsto que reciba sepultura. (RD/Agencias)