Preces de los Fieles (D. 22º TO B 2ª lect. 02.09.2018): la vida de Jesús nos realiza plenamente

“Hemos sustituido el seguimiento a Jesucristo por la adhesión doctrinal (al Catecismo, a la teología de nuestro gusto)... Nosotros somos seguidores de Jesús...; nuestro verdadero centro es Jesús y hay que volver constantemente a Él, el único que puede salvarnos y salvar a su Iglesia”. Pidamos seguir a Jesús diciendo: “Queremos volver al `amor primero´” (Apoc 2, 4-5).

Por la Iglesia:
- que mire más la vida de Jesús y le siga;
- que sea capaz de cambiar sus leyes para vivir mejor el Evangelio.
Roguemos al Señor: “Queremos volver al `amor primero´” (Apoc 2, 4-5).

Por la reforma del ministerio:
- que desaparezca la “soberbia y autosuficiencia” del clero;
- que todos tengamos voz y voto de acuerdo con el Evangelio.
Roguemos al Señor: “Queremos volver al `amor primero´” (Apoc 2, 4-5).

Por los niños y jóvenes:
- que sean respetados y orientados a realizarse en plenitud;
- que sean estudiosos, constantes, buenos amigos, sinceros...
Roguemos al Señor: “Queremos volver al `amor primero´” (Apoc 2, 4-5).

Por las familias:
- que los padres y madres sean signo del amor divino, gratuito e incondicional;
- que toda familia humana sea acogida y ayudada por nuestras comunidades.
Roguemos al Señor: “Queremos volver al `amor primero´” (Apoc 2, 4-5).

Por los sin-familia:
- que sientan a nuestras comunidades cristianas como su familia;
- que sientan al Padre y a Jesús como Padre y hermano de todos.
Roguemos al Señor: “Queremos volver al `amor primero´” (Apoc 2, 4-5).

Por esta celebración:
- que nos haga volver al “amor primero”, el amor derramado por el Espíritu Santo;
- que nos llene de alegría, de consuelo, de audacia para seguir a Jesús.
Roguemos al Señor: “Queremos volver al `amor primero´” (Apoc 2, 4-5).

Que tu Espíritu Santo nos convenza de que: “la práctica religiosa pura y sin mancha delante de Dios, nuestro Padre, consiste” en atender a los más débiles, alimentar y vestir al hambriento y al desnudo, y crear fraternidad entre todos. Te lo pedimos a ti Jesús que vives por los siglos de los siglos.

Amén.

Rufo González
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