Sobre el Génesis y el Big Bang, respuesta a José Donis Catalá

Respondiendo a José Donis Catalá:
Me preguntaste mi opinión sobre tu escrito en tu blog que nos habla del génesis y del Big Bang. Lo que el génesis dice es como bien afirmé antes un mito sumerio (es posible leer esto en el libro de Historia Antigua y Universal de Ana Maria Vázquez Hoys, Ed UNED) pero la esencia del génesis es que Dios es creador de todo. Si luego la creación sigue su curso o si Dios interviene como le parece, eso nadie te lo puedo decir porque es una pregunta con respuesta múltiple a la que solo Dios tiene respuesta. Pero a mi como creyente me basta saber que Dios crea el universo, pero como científico me gusta saber como lo crea.
En el mundo han existido muchas teorías sobre la creación, muchísimas. Einstein y de Sitter propusieron un modelo de universo estático, sin gran explosión. Einstein se pasó muchos años buscando las ecuaciones diferenciales que describieran ese modelo de universo, y cuando por fin lo logró se encontró que le era totalmente imposible deducir que signo debería tener una constante cosmológica en sus ecuaciones para lograr un modelo estático de universo. Mientras estuvo pensando en esto, se le adelantaron otros físicos como Hubble, que propusieron el Big Bang.
Actualmente el Big Bang sigue siendo una teoría válida. Cierto es que presenta problemas, pero se debe a que no sabemos si en el universo podría existir materia oscura de anteriores explosiones o si acaso las ecuaciones de la relatividad general hasta ahora utilizadas para describir esto tengan un error. En ciencia la mejor teoría siempre suele ser la que mejor sea capaz de explicar una gran multitud de fenómenos y que incluso podamos describirla con modelos matemáticos.
Lo que has comentado sobre como pudo ser el universo en sus primeros estados de vida es pura física teórica aplicada a contar chismes para impresionar a los que no se dedican a la física. Para elaborar esos chismes partimos del supuesto que las 4 fuerzas principales de la naturaleza hayan sido iguales desde el comienzo hasta hoy, pero nada parece indicar que esto sea realmente así. Hay teorías a millares. Incluso hoy se cree que pudiera existir una quinta fuerza que sea la responsable de acelerar la velocidad con la que se están alejando las galaxias. Lo que hoy por hoy ocurre con la cosmología es que somos incapaces de salir al espacio y hacer viajes a otros sistemas solares, y solo podemos enviar sondas y satélites con una misión específica y concreta.
Yo hace tiempo pregunté al recientemente fallecido Catedrático de Termodinámica y director del Departamento de Física Aplicada I, Juan Ignacio Mengual Cabezón, sobre la veracidad de las teorías de la física teórica, el me respondió que “eran simples teorías en espera de experimentos o algo que las confirmasen”.
Voy a ponerte un ejemplo de física teórica. Sino sabes matemáticas no intentes entender la ecuación que escribo, solo atiende a lo que explico:
(d^2/dt^2)•x = - k•x
Esta ecuación diferencial (con derivada segunda de x con respecto al tiempo) es la del oscilador armónico, con ella podemos describir el movimiento de los muelles, los péndulos con oscilaciones pequeñas, algunas corrientes eléctricas, y también algunos fenómenos cuánticos que posean potenciales cuadráticos.
Ahora observa esta otra:
(d^2/dt^2)•x = k•x
Esta ecuación diferencial es como la anterior, pero le falta el signo -. Esta ecuación es posible resolverla y calcular soluciones como la anterior, trabajar con ella, etc. Pero es curioso que lo que describe son fenómenos físicos que hasta donde tengo entendido, no existen. Esta ecuación describiría perfectamente un antimuelle, es decir, un muelle que perturbado le diera por estirarse hasta el infinito o contraerse hasta desaparecer. ¿Pero tú has visto en tu vida un antimuelle? Nadie lo ha visto.
Por eso hay que tener cuidado con las ecuaciones de la física, en especial con las de la relatividad general y con otras más. Podrían tal vez darnos soluciones de cómo fue el universo en el pasado y en realidad jamás haber sido así. Incluso podríamos tener un error en un signo o no saber que signo debemos aplicar como le pasaba a Einstein.
Mi recomendación es que nunca compres libros de divulgación física, ni creas a los filósofos de la ciencia, podrían engañarte sin ellos quererlo. Es mejor estudiar física, hacer física a esperar a que alguien te venda el mundo de “Nunca Jamás”.
No se si he sido claro contigo y con el resto de lectores. Para cualquier comentario, escribe en el blog o al correo
Un saludo
Julián Moreno Mestre