¡¡Que listillo!!

Sin duda debo reconocer que uno de los mayores listos es el eminentísimo Cardenal Antonio Cañizares. En estos momentos la inmensa mayoría de los Españoles asistimos atónitos ante la mayor metedura de pata de José Luis Rodríguez Zapatero, metedura de pata que se saldará, ya lo veremos, con un desastre mucho mayor, como va a ser dentro de un mes contemplar a de Juan Chaos al lado de Arnaldo Otegui riéndose de Zapatero, de España y de las víctimas del terrorismo.

Pues el Cardenal Cañizares está decidido a comparar a De Juana Chaos con los 90.000 abortos ocurridos en España. Sin duda la cifra de abortos es trágica, 90.000 personas que no han tenido ocasión de nacer, 90.000 futuros el año pasado destruidos. Pero me parece deleznable mezclar a De Juana Chaos con los abortos, salvo si el prelado hubiese deseado que la madre De Juana lo hubiese abortado, cosa que creo hubieran agradecido 25 personas que ya no están entre nosotros y otro montón que acabó mutilado.

Pues mire Monseñor, opine contra De Juana lo que quiera y lo que desee usted es libre de hacerlo, pero no mezcle dos tragedias que bien tienen poco que ver. El gobierno y el estado tienen la obligación de defender la justicia y hacer cumplir la ley, y también la obligación de evitar que este cabrón se muera (digo Cabrón y no hijo de puta porque gracias al blog de 21RS sabemos que la madre de De Juana era una buena mujer víctima de los crímenes de su hijo). Si usted quiere hacer campaña contra el aborto hágala, yo pienso hacerla desde este blog en cuanto tenga tiempo de redactar una pensada carta al Ministerio de Sanidad, Asuntos Sociales y a la presidencia y vicepresidencia del Gobierno, incluso a los partidos políticos. Pero evite mezclar dos tragedias, que no es al estado a quien le corresponde proteger a un feto, embrión o como dientes se llame en cada etapa, sino a las madres, las cuales parece que a muchos de ustedes, los obispos, se les ha olvidado que son ellas principalmente las que deben defender la vida de los fetos, embriones,… y no el estado.
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