Munar, expresidenta del Parlamento Balear, y su banda, todos en la cárcel, reconocen que no han devuelto el dinero robado al decir que devolverán parte si les reducen la pena. El enfado de los habitantes de Gamonal (Burgos), el 15 M y otras muchas manifestaciones son síntomas del mismo malestar. Los ciudadanos ven los partidos como pandillas de amiguetes que se meten en política para hacerse ricos sin talento, sin arriesgar capital y sin hacer oposiciones. Antes de inventar otros recortes, el Gobierno debería pensar en suprimir cientos de cementerios para elefantes tales como el Senado, las Diputaciones, reducir el número de diputados y otros mil puestos creados y mantenidos sólo para refugio de políticos.