Celebraciones Teológicas con Carme Soto, Andrés Torres Queiruga y Lucía Caram Fieles reunidos en Montesclaros buscan una Iglesia "horizontal, inclusiva, circular y de iguales"
"Constatamos la invisibilización en los textos y en las comunidades de las mujeres, desde los primeros siglos y que llega hasta el presente"
"Soñamos con vivir en una iglesia que sigue el modelo de Jesús que trastoca el orden establecido y propone una comunidad horizontal, inclusiva, circular, de iguales"
"Todas estamos llamadas a la construcción de un mundo mejor", reafirman
"Todas estamos llamadas a la construcción de un mundo mejor", reafirman
| Celebraciones Teológicas de Montesclaros
Unas setenta personas, buscadoras en nuestro camino de fe, nos hemos reunido durante cuatro días en Montesclaros para nutrirnos con la sabiduría de personas como Carme Soto, Andrés Torres Queiruga y Lucía Caram. Así como de las experiencias de los proyectos solidarios de inserción: Brumas-Plís, Cantáfrica, Sercade, Amoverse y la Fundación San Martín de Porres.
Ha sido fundamental el diálogo y discernimiento entre todos/as para actualizar y ser más fieles a la PALABRA que sigue viva.
Hemos rescatado la memoria de la experiencia de Dios que tuvieron las mujeres del Antiguo y del Nuevo Testamento. Constatamos la invisibilización en los textos y en las comunidades de las mujeres, desde los primeros siglos y que llega hasta el presente.
Buscamos que nuestras palabras y la idea de Dios, revelada por Jesús, sean coherentes. Esta sintonía nos urge a cambios en la liturgia, la pastoral y el compromiso social.
Queremos ponernos a la escucha de Dios a través de la oración para que descubramos que impulsa nuestro ser al bien y al de las personas que sufren.
Soñamos con vivir en una iglesia que sigue el modelo de Jesús que trastoca el orden establecido y propone una comunidad horizontal, inclusiva, circular, de iguales.
Con interrogantes, pero con esperanza, sabemos que no es posible el paraíso, el mal está presente, pero es posible el amor.
Nos llenan de esperanza las experiencias de los colectivos que trabajan en la inserción laboral de inmigrantes y de personas en exclusión porque han creído en la PALABRA y han pasado del dicho al hecho.
Todas entendemos el Evangelio encarnado. Somos las manos de Dios y para ponernos en acción es imprescindible el diálogo que nos abre la mente y nos ayuda a conocer a los/as demás y vencer los prejuicios.
Todas estamos llamadas a la construcción de un mundo mejor.
El Reino ya está aquí en medio de nosotros/nosotras.
El Reino somos nosotros/nosotras.
