La segunda vuelta, el 5 de febrero, si Dagnino no se retira antes Las elecciones a la presidencia de la ACdP entran en su recta final
(José Manuel Vidal).- Pasadas las celebraciones navideñas, la ACdeP encara ya el momento de la última y definitiva votación de desempate entre los dos candidatos a presidente: Alfredo Dagnino Guerra, que aspira a la reelección, y Carlos Romero Caramelo, su posible alternativa. La votación será el día 5 de febrero y, por lo tanto, los dos candidatos ponen a punto su campaña para esta segunda vuelta.
Unas elecciones que, como ya hemos informado en RD, deberían haber terminado el pasado día 7 de diciembre. Pero en esa cita ocurrió algo inesperado: el empate entre ambos candidatos, lo que obligó a una nueva convocatoria electoral.
Las espadas siguen en todo lo alto. A día de hoy, ninguno de los dos aspirantes ha retirado su candidatura, lo que dejaría al otro como definitivo presidente. Sin embargo, fuentes de los propagandistas no descartan del todo que, al final, Alfredo Dagnino decida tirar la toalla.
Dicen que el hecho de que Dagnino haya conseguido sólo empatar con un candidato alternativo que competía con él en muy inferiores condiciones materiales indica el gran deseo, e, incluso, la ilusión de cambio que existe en esta asociación tan especial del laicado español.
Y es que la ACdP quiere volver a ser lo que siempre fue y recuperar la armonía entre todas las sensibilidades existentes en su seno. Recuperar, en definitiva, su propia operatividad en momentos tan delicados como los que está viviendo la sociedad española.
De no retirarse y según ha podido saber RD, lo más probable es que Alfredo Dagnino salga derrotado en las votaciones. Entre otras cosas, porque crece cada vez más la simpatía hacia la candidatura de Carlos Romero. Incluso por parte de miembros de la Asociación que apoyaron inicialmente a Dagnino, pero que quieren sumarse al reencuentro de todos en un proyecto común.
En cualquier caso, la última palabra la tienen las urnas en un proceso en el que, por tratarse de una asociación católica, debe brillar el juego limpio, el buen hacer y la transparencia.