El centro de la Obra difundió una nota entre los alumnos al publicarse el caso El profesor de Gaztelueta señalado por haber abusado sexualmente de un alumno negó las acusaciones
(Iker Rioja, en El Mundo).- El profesor de Gaztelueta J.M.M.S., al que un antiguo alumno señala por haberle sometido a abusos sexuales cuando cursaba primero y segundo de ESO, negó tajantemente las acusaciones cuando uno de los responsables de este centro del Opus Dei en Leioa le pidió su versión de los hechos, denunciados en junio de 2011.
"Alguna vez le he enseñado alguna web de Hermione Granger [la protagonista de Harry Potter, encarnada por la joven actriz Emma Watson] para mostrarle el desarrollo de las chicas", ofreció como explicación el docente, con voto de celibato, ante las quejas del chico y de su familia porque, al parecer, le había enseñado en su ordenador material para adultos.
J.M.M.S. también rechazó que realizara tocamientos al menor. Éste ha relatado ante psicólogos y psiquiatras que el profesor, que impartía Religión y Lengua y que además era su preceptor, le sacaba con asiduidad del aula. Lo llevaba a su despacho, cerraba con llave y, por espacio de hasta 50 minutos y con las cortinas corridas, llegó a pedirle que se quitara la camisa y los pantalones del uniforme con el ánimo, según esta versión de los hechos, de acariciarle pecho y muslos. Le invitó también a que se sentara en su regazo para ver la pantalla del ordenador, como adelantó EL MUNDO del País Vasco en su edición de ayer.
Los expertos médicos destacan lo "coherente" del relato del adolescente, si bien el profesor denunciado no le da credibilidad, siempre según las explicaciones que ofreció a sus superiores cuando le preguntaron por lo sucedido. "Pude cerrar las cortinas porque daba el sol y le dije que, como hacía calor, se desabrochara el botón [superior] de la camisa", argumentó. En cuanto a las supuestas caricias, apuntó que "igual" le dio "algún golpecito de ánimo", pero que nunca pasó de ahí.
Justificó el sacar al chico de clase mucho más que a sus compañeros "para apoyarle" con los estudios. Los expertos que han analizado el caso del menor concluyen también que el docente propició un entorno hostil para el chico en el aula, de tal modo que la víctima lo fue también de acoso escolar.
El profesor no continúa ahora mismo en Gaztelueta, según informa la dirección de la escuela del Opus Dei y según ratificó ayer mismo a las familias de los 1.200 alumnos del colegio en una nota interna difundida como reacción a la noticia publicada por este periódico, en la que también se destacaba «la inexistencia de antecedentes de conductas anómalas ni observaciones que refrenden las acusaciones» de la familia. El curso pasado, J.M.M.S. ya no impartió clases allí al tener solicitada una excedencia para aprender inglés en el extranjero.
El Departamento de Educación, consultado por este diario, explicó que ante situaciones como éstas no puede suspender de sus funciones a un profesor o trasladarlo. Y es que sus resoluciones acerca de un centro privado no son vinculantes aunque, como en este caso, tenga financiación pública y actúe como escuela concertada.
El inspector que ha analizado este caso de Gaztelueta trasladó todas sus actuaciones a la Fiscalía, que hasta el momento sólo ha impulsado un proceso penal por el acoso escolar pero no por los abusos sexuales. La familia, de hecho, desea esperar hasta que el menor mejore de las secuelas sufridas para judicializar estos hechos, aunque sí elevó una queja formal ante el colegio.