Verdaderamente ha resucitado. Aleluya.
Si no hubiera resucitado vana sería nuestra fe. Nada de la religión católica tendría sentido. Nos habría engañado y cuanto antes saliéramos de esa farsa mejor nos iría.
Lo que no puedo entender es a aquellos que no creen en la Resurrección de Cristo y siguen siendo curas. ¿Para qué? Salvo que se quieran valer de un status para seguir montados en un machito que saben es falso. Pero que les permite ser alguien.
Quien se nos ha mostrado resucitado de entre los muertos haga el milagro, mucho más fácil que el de su Resurrección, de resucitar a la fe esas almas que la han perdido. Fe sin la que no se puede estar en la Iglesia. No es que los echemos, es que se han ido ellos. Aunque pretendan engañarnos diciendo que están.