"Esperamos que este gesto suyo se multiplique y anime a otras personas y grupos a hacer lo mismo" Papa Francisco y Cardenal Czerny agradecen a la Reforma Agraria en Brasil su solidaridad en estos tiempos de Covid-19

El Movimiento Sin Tierra distribuye alimentos en Belém
El Movimiento Sin Tierra distribuye alimentos en Belém

Desde el comienzo de la pandemia, los asentamientos de la reforma agraria en Brasil han distribuido más de 2.000 toneladas de alimentos, principalmente en las periferias de las ciudades

"Esta pandemia trae mucho dolor y sufrimiento en todo el mundo, especialmente a las personas más pobres y excluidas"

"Que nuestro Buen Dios proteja y bendiga a todas las familias que trabajan en la tierra y luchan por el reparto de la tierra y el cuidado de nuestra casa común"

Distribución de alimentos en la diócesis de Apucarana, estado de Paraná

El día en que en Brasil se celebra el día del trabajador rural, el cardenal Michael Czerny, Subsecretario del Dicasterio para el Servicio de Desarrollo Humano Integral, en nombre del Papa Francisco, ha enviado un mensaje en el que expresa "nuestra alegría por el hermoso gesto de distribución de alimentos que las familias de la Reforma Agraria en Brasil están haciendo en estos tiempos de Covid-19".

Desde el comienzo de la pandemia, los asentamientos de la reforma agraria en Brasil han distribuido más de 2.000 toneladas de alimentos, principalmente en las periferias de las ciudades. Este 25 de julio, se espera que 5.000 familias campesinas de los asentamientos y campamentos de la reforma agraria del estado de Paraná, en el sur de Brasil, donen aproximadamente 200 toneladas de alimentos.

Desde el Movimiento de Trabajadores Rurales Sin Tierra - MST, su coordinadora nacional, ha destacado en las últimas semanas que "es importante reforzar la solidaridad, especialmente en esta época de pandemia, en la que el gobierno está lanzando una ofensiva contra los trabajadores, contra los derechos de los pueblos indígenas, los quilombolas y los sin tierra". La misma idea aparece en el mensaje firmado por el cardenal Czerny, "esta pandemia trae mucho dolor y sufrimiento en todo el mundo, especialmente a las personas más pobres y excluidas".

Frente a esto, el texto enviado a las familias de la Reforma Agraria destaca que "compartir los productos de la tierra para ayudar a las familias necesitadas de la periferia de las ciudades es un signo del Reino de Dios que genera solidaridad y comunión fraternal. Estas son actitudes que hacen presente la acción de Jesús, que se llenó de compasión ante las multitudes hambrientas, como se recoge en el Evangelio. Por eso el mensaje afirma que "compartir produce vida, crea lazos fraternales, transforma la sociedad", algo que tanto el Papa Francisco como el cardenal Michael Czerny quieren que sea un gesto que "se multiplique y anime a otras personas y grupos a hacer lo mismo".


Jóvenes organizan el reparto de las donaciones

Un ejemplo de estas actitudes lo encuentramos en Belém, capital del estado de Pará, donde la Red de Solidaridad Amazónica, que reúne a la Comisión Pastoral de la Tierra – CPT, el MST, la Sociedad Paraense de Derechos Humanos, la Confederación de Religiosos de Brasil – CRB, y otros movimientos, están concretando "la solidaridad de la tierra y la ciudad, en el reparto de los productos de los asentamientos aquí en la región más cercana a Belém", según el Padre Paulo Joanil da Silva, agente de la CPT. Se trata de alimentos producidos por los asentamientos de la reforma agraria, sin agrotóxicos, en grandes cantidades, que han sido distribuidos por unos 20 jóvenes, en 300 canastas, en la sala Don Hélder Cámara, dentro de la sede de la Conferencia Nacional de los Obispos de Brasil del Regional Norte 2.

Este día 25, después de un momento de mística, se han ido distribuyendo alimentos en la periferia de Belém, en comunidades donde "predomina el hambre, pesa el desempleo, donde espera la comunidad más vulnerable", allí donde se encuentran los pobres de la periferia, "sufriendo como consecuencia de la pandemia, y también sufriendo todo tipo de discriminación, racismo y perversidad de este sistema capitalista", dice el padre Paulinho. Según el religioso, "el hambre en la ciudad se supera con la lucha del campo, los campesinos, los trabajadores rurales sin tierra". El agente de la CPT señala que "es un acto que demuestra, una vez más, que la reforma agraria es el camino, la tierra para los sin tierra produce para todos”. No debemos olvidar que el 70% de los alimentos que llegan a la mesa de los brasileños provienen de la agricultura familiar.

Este gesto de compartir es visto por el padre Paulinho como un signo de que "todos estamos llamados a apostar por la reforma agraria", que debe conducir a lograr no sólo la tierra, como los demás derechos en el campo y la valorización de la agricultura familiar. Esto lleva al religioso oblato a recordar el deseo del Papa Francisco de tierra, techo y trabajo para todas las personas del mundo.

En el mensaje, el Santo Padre y el purpurado envían la bendición de Dios "sobre los productos que están compartiendo y que Él también bendiga a todas las familias que han donado y a las que recibirán los alimentos". Al mismo tiempo, imploran "que el Espíritu Santo les proteja del virus del Covid-19, les dé valor y esperanza en este tiempo de aislamiento social! Aprovechando el día del agricultor, piden "que nuestro Buen Dios proteja y bendiga a todas las familias que trabajan en la tierra y luchan por el reparto de la tierra y el cuidado de nuestra casa común".

Donaciones en Belém

Mensaje a las Familias de la Reforma Agraria en Brasil

Roma, 25 de julio de 2020

¡Queridos hermanos y hermanas!

En nombre del Papa Francisco y también en el mío, queremos expresar nuestra alegría por el hermoso gesto de distribución de alimentos que las familias de la Reforma Agraria en Brasil están haciendo en estos tiempos de Covid-19. Esta pandemia trae mucho dolor y sufrimiento en todo el mundo, especialmente a las personas más pobres y excluidas.

Cuando Jesús vio las multitudes hambrientas se llenó de compasión y multiplicó los panes para satisfacer el hambre de la gente. Todos fueron alimentados y todavía sobró (Mc 6:34-44). Compartir produce vida, crea lazos fraternales, transforma la sociedad. Esperamos que este gesto suyo se multiplique y anime a otras personas y grupos a hacer lo mismo, porque "Dios ama a los que dan con alegría" (2 Cor 9:7).

Pedimos a Dios Padre que derrame su bendición sobre los productos que están compartiendo y que también bendiga a todas las familias que han donado y a las que recibirán los alimentos. ¡Y que el Espíritu Santo les proteja del virus de Covid-19, les dé coraje y esperanza en este tiempo de aislamiento social! Y en este día de los agricultores, ¡que nuestro Buen Dios proteja y bendiga a todas las familias que trabajan la tierra y luchan por el reparto de la tierra y el cuidado de nuestro hogar común!

Cardenal Michael Czerny S.J.

El obispo de Apucarana agradece al MST

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