Irak: el Gobierno reconoce al patriarca Sako como responsable de los bienes de la Iglesia caldea
Se abre la vía para superar la crisis institucional que llevó al cardenal a abandonar Bagdad
Un decreto firmado por el primer ministro iraquí, Muhammad Shiaa al-Sudani, «nombra» al cardenal iraquí Louis Raphael Sako, patriarca de la Iglesia caldea "en Iraq y en el mundo", y le reconoce como responsable último de los bienes y dotaciones de su Iglesia patriarcal
De esta manera, se abre la vía para superar la crisis de relaciones entre el Patriarcado caldeo y la dirección político-institucional de Irak, que había llevado al patriarca Sako a abandonar la sede patriarcal de Bagdad y trasladarse a Erbil
(Agencia Fides).- Un decreto firmado por el primer ministro iraquí, Muhammad Shiaa al-Sudani, «nombra» al cardenal iraquí Louis Raphael Sako, patriarca de la Iglesia caldea "en Iraq y en el mundo", y le reconoce como responsable último de los bienes y dotaciones de su Iglesia patriarcal.
De esta manera, se admiten las prerrogativas patriarcales del cardenal Sako y abre la vía para superar la crisis de relaciones entre el Patriarcado caldeo y la dirección político-institucional de Irak abierta en julio de 2023, crisis que había llevado al patriarca Sako a abandonar la sede patriarcal de Bagdad y trasladarse a Erbil.
El texto del decreto dice textualmente "Sobre la base de los poderes que nos otorga la Constitución" y de otras referencias legislativas de haber "decidido lo siguiente: 1) Nombrar al Cardenal Patriarca Louis Raphael Sako Patriarca de los Caldeos en Irak y en el mundo; 2): implementar la autoridad de dotación por la que el Patriarca es responsable de las dotaciones de la Iglesia Caldea".
En julio de 2023, el presidente iraquí Abdul Latif Rashid había anulado el Decreto 147, promulgado por su predecesor Jalal Talabani el 10 de julio de 2013, que sancionaba a nivel de legislación nacional el nombramiento pontificio del Patriarca como jefe de la Iglesia caldea "en Irak y en el mundo" y le reconocía como "responsable de los bienes de la Iglesia".
Desde el comienzo de la crisis, el patriarca Sako sólo había vuelto una vez a Bagdad, para reunirse con el Primer Ministro Soudani.
