Enviados para regresar y evangelizar.

Este domingo varias diócesis de España han vivido una celebración de envío de los jóvenes que marchan a la Jornada Mundial de la Juventud que tendrá lugar a finales de este mes de julio en Polonia, y de cuantos les acompañan.


La diócesis de Vitoria escogió la misa para jóvenes que el obispo monseñor Elizalde instauró recientemente tras hacerse cargo de la diócesis vasca.


En la celebración monseñor Elizalde dijo: “La JMJ empieza hoy en esta ceremonia de envío.” Y tomando como base las lecturas del Antiguo Testamento añadió: “Dios se hizo hombre para hacer al hombre Dios. Desde entonces el icono de Dios es la persona humana.” “La JMJ es una ocasión para reconocer a Dios en los demás. Dios puede hablarte a través de personas concretas, desde este mismo momento.” El conocido pasaje de Marta y María le dio pie para aclarar que “el error de Marta no fue desvivirse en el servicio, fue quejarse, compararse con María. El seguimiento es personal, aunque lo hagamos en comunidad. Cuando nos comparamos nos envenenamos y la frescura de la entrega se desvanece.” Elizalde insistió en el cansancio y el desánimo que provocan estas actitudes de queja por lo que hace o deja de hacer el otro y recordó una frase de Jesús a Pedro cuando éste le pide cuentas sobre la actitud de Juan y que considera clave como antídoto contra esa actitud: “A ti qué. Tú sígueme. La eucaristía es un momento para escuchar ese “a ti qué”, y para sentirnos enviados con ese “tú sígueme”.”


En el ofertorio los jóvenes acercaron al altar un cartel con el logo de la JMJ y una bola del mundo. En la celebración se tuvo un recuerdo por las víctimas de los últimos atentados terroristas en Niza, los muertos en Turquía y el resto de conflictos que se viven en otros puntos del planeta.
En la JMJ de este año participarán varios jóvenes de Vitoria, algunos viajarán integrados en las peregrinaciones organizadas por grupos, movimientos y órdenes religiosas que recogen a miembros de sus comunidades en varios puntos del país. Pero la delegación de Pastoral con jóvenes de Vitoria ha organizado un autobús en el que viajan 45 jóvenes y un equipo de 10 personas coordinando toda la expedición.



Su recorrido les llevará a Padua, Venecia, Sosnowiec y Czestochowa (en Polonia), el Campo de Concentración de Auschwitz y finalmente Cracovia, lugar de los actos de la JMJ. Dieciséis días cargados de experiencias y de religiosidad.

Algunos de los jóvenes que participan en esta JMJ toman el relevo a sus padres que fueron testigos del nacimiento de esta iniciativa del hoy San Juan Pablo II y continuada por sus sucesores, Benedicto XVI y Francisco.

Non solum sed etiam.


El obispo envió a los jóvenes y a quienes les acompañan, pero en ese grupo, también está él. Por eso no solo el obispo, sino la Diócesis es la que envía, enviamos, a este grupo selecto, en la confianza de que no son ellos quienes han elegido, sino Él quien los ha elegido. Y los enviamos para qué:
Les enviamos para que sean testigos de esta Iglesia que peregrina en Vitoria.
• Les enviamos para que se empapen del estilo de Jesús de Nazaret a través de las palabras del Papa Francisco y de cuantos Dios ponga en su camino.
• Les enviamos para que regresen y sean protagonistas de la construcción de la Primavera de la Iglesia en Vitoria.
Id, volved, y anunciad el Evangelio a todo el Mundo
.
Para quienes conocimos el comienzo de esta historia en el año 1985 o participamos en algunas de sus ediciones en Roma, en Santiago de Compostela, en París, en Czestochowa o en Madrid, ver a nuestros hijos y a los hijos de nuestros amigos tomar el testigo de una de las iniciativas de la Iglesia que más ha marcado probablemente las últimas décadas de la Iglesia, es emocionante.
Las JMJ han sido el caldo de cultivo de nuevas vocaciones, de proyectos de pareja, de iniciativas de evangelización, de comunicación de experiencias evangelizadoras. Las JMJ forman parte del proyecto de Iglesia del Tercer Milenio. Por eso enviamos a este grupo de jóvenes y adultos, con nuestro obispo al frente, para ir y regresar, y hacernos partícipes a todos de las gracias y bendiciones que estos encuentros suelen generar. Amén, así sea.


El grupo de la Diócesis de Vitoria ha abierto un blog a través del cual informarán de su viaje, sentimientos y experiencias: https://vitoriaenlajmj2016.wordpress.com/

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