YOLANDA TAMAYO
Me he despojado de prisas y dejando atrás el ajetreado zumbar de mi cabeza he decidido sentarme a sus pies.
Ahora, que la aceleración preña las calles, enarboladas todas ellas de luces resplandecientes, quiero detener mi mirada y posarla en Él
Voy camino de Belén, con los ojos anegados de ilusión, sé que una estrella me guía e indicará el camino a seguir.
No he preparado ningún discurso, no he envuelto ningún regalo, tan sólo porto un corazón ansioso por ver a ese niño del que hoy todos hablan.
Sé que viene a traernos vida, que ataviado con simpleza hará cosas grandes.
Puede leer aquí el artículo completo de esta colaboradora de la revista Ventana Abierta de fe protestante titulado Camino hacia Belén