(RD/Efe).-El presidente de la Unión de Ateos y Librepensadores, Albert Riba, se ha mostrado hoy 'contento' de la acogida que ha recibido la campaña en favor del ateísmo que su asociación ha promovido, porque 'los ciudadanos han reaccionado con madurez y han demostrado que en España se puede hablar de religión'.

'Algunas personas están de acuerdo con el contenido de nuestra campaña y otras en contra, pero la gente lo permite y lo respeta', ha dicho Riba, en referencia a los anuncios con el lema 'Probablemente Dios no existe. Deja de preocuparte y disfruta de la vida', que desde ayer se pueden leer en dos autobuses de Barcelona.

Fuentes de Transportes Metropolitanos de Barcelona (TMB) han confirmado a Efe que no se ha producido ningún incidente y que los autobuses de las líneas 14 y 41 que lucen los anuncios han circulado con normalidad por el centro de la ciudad.

En las paradas de estas dos líneas de autobuses, los usuarios comentaban esta mañana la campaña sosegadamente.

'La verdad es que a mí me da igual, aunque me resulta gracioso que haya un autobús ateo y otro creyente', ha comentado una joven usuaria del autobús 14, en referencia a la campaña que han anunciado los cristianos evangélicos de Madrid y que llevará el eslogan 'Dios sí existe. Disfruta de la vida en Cristo'.

Una anciana que esperaba el autobús en la misma parada ha asegurado que 'Dios existe' porque ella estuvo 'muy enferma' y Dios la curó.

No obstante, ha añadido que 'los demás pueden pensar lo que quieran, y si no creen en Dios, pues que no crean', ya que 'a la gente hay que valorarla por sus actos, y no por sus creencias religiosas'.

Una mujer ecuatoriana ha discrepado y ha puntualizado que 'cada uno debe expresar sus opiniones en su casa y no en un transporte público como el autobús', aunque ha añadido que 'hay problemas más graves en el mundo que esta campaña de los autobuses'.

En este punto, un señor de mediana edad que esperaba el autobús acompañado de su esposa ha puntualizado que 'lo que sobran son fanáticos'.

En su opinión, 'los creyentes tienen derecho a creer en Dios y los ateos a no creer, lo que no se puede admitir es que la ideologías acaben en fanatismo, como el de los culpables de la guerra de Gaza'.